Toñi Salazar confiesa que sufe un trastorno de ansiedad y avisa a Los Chunguitos
No corren buenos momentos para la familia Salazar. El clan de hermanos cantantes no solo atraviesa por complicaciones laborales y personales sino que la ex de Azúcar Moreno está muy mal.
La desaparición mediática de Toñi Salazar no es casualidad. Su bajo estado anímico le ha motivado un trastorno de ansiedad severa que se ha agravado en las últimas semanas, hasta el punto de tener que someterse a un estricto tratamiento médico. Este último año ha sido especialmente difícil para la artista, el enfrentamiento personal y judicial con su ex, Pedro Rilo, le está pasando una factura emocional que va más allá del asunto económico que se disputa la expareja. Un coche y un piso en la Costa del Sol han sido y, son los objetos de la discordia.
Hace un año que Toñi y su hijo Borja se presentaron en Marbella para reclamarle a Pedro Rilo el vehículo y la mitad del piso en el que vive el compositor desde hace catorce años. Toñi le acusó de no haberle pagado el cincuenta por ciento de la vivienda, ya que según contó la artista lo pagaron a medias, incluso ella aportó más capital al gozar de mayores posibilidades económicas cuando aún eran pareja. Se habían separado hace años y Salazar nunca pensó en pedirle su parte, pero llegó la pandemia, la falta de trabajo y las dificultades económicas para afrontar el día a día y, sintió la necesidad de reclamarle lo que ella considera también como suyo.
Al borde de la depresión Toñi Salazar se sincera con ESdiario
Se desató la guerra entre ellos con denuncias de por medio y un juicio que aún está por salir. Un año después y al borde de la depresión, Toñi Salazar se sincera de nuevo con ESdiario sobre su situación actual y el calvario emocional que no la deja vivir en paz: "Desde que comenzó el enfrentamiento con Pedro no he levantado cabeza. Yo le he querido muchísimo y ver como estamos ahora me destroza completamente. Me da mucha pena que no hayamos podido sentarnos a hablar para solucionar nuestro problema. Si pudiese daría marcha atrás, no le habría denunciado y, si llego a saber todo lo sucedido no habría hecho ese viaje a Marbella, lo tengo grabado a fuego, no puedo olvidar la presencia de la policía, la cara de mi hijo aquél día… sé que estoy en mi derecho de reclamarle lo que me pertenece pero no me compensa porque estoy muy mal emocionalmente".
No es la primera vez que Toñi confiesa su decepción con Pedro Rilo, su pareja durante más de veinte años, pero reconoce que no ha superado haber perdido la amistad de una persona que ha sido tan importante en su vida y, que ejerció de padre con su hijo Borja dándole sus apellidos.
"Estoy medicada con pastillas, triste y angustiada"
Ese vacío no consigue llenarlo y no puede dejar de darle vueltas sin entender, ¿por qué nunca se sentaron a hablar?.
"Lo estoy pasando muy mal. Los últimos meses han sido muy duros pero llevo dos semanas con una ansiedad severa diagnosticada. Me estoy tratando con pastillas, estoy triste, tengo una ansiedad que a veces me impide respirar, se me pone un nudo en el pecho, siento angustia y me cuesta dormir. Además me enteré que Pedro había estado enfermo y se removieron muchas sensaciones, no quiero que le pase nada porque mi amor por él ha sido muy fuerte", detalla muy tocada.
"Entro en una iglesia y paso horas hablando con Dios"
A pesar de las dificultades, Toñi quiere seguir luchando para volver a ser la misma de antes: "No me quedo en la cama viendo pasar la vida, deseo recuperarme, por eso me esfuerzo en salir de casa, salgo a pasear, voy al parque, me siento en un banco y me dedico a pensar, pero lo que realmente me relaja es entrar en la Iglesia y rezar, siempre he sido muy religiosa y dentro del templo puedo pasar horas hablando con Dios. También disfruto con mi nieta Victoria que es mi debilidad, leo muchos libros de psicología, escribo como lo he hecho siempre y de vez en cuando alguna cena con mi hermana y unos íntimos amigos".
Toñi Salazar ha sufrido una extraña transformación también en su forma de ver la vida: "No me apetece salir con mucha gente, no quiero ir a fiestas, ni eventos, ni saraos… Ahora huyo de las cámaras, no quiero escándalos ni problemas. Los últimos episodios vividos me han marcado mucho".
Los Chunguitos volverán a estar juntos porque la gente no los quiere separados
A su crisis personal se une la reciente disolución de Los Chunguitos, una experiencia por la que ella también pasó cuando Azúcar Moreno se separó: "Reuní a mis hermanos y les dije que se reconciliaran, estoy segura que van a volver, es cuestión de tiempo. Además les hablé muy claramente, ellos por separado no tienen la fuerza artística que tienen juntos. Es lo que nos pasó a mi hermana y a mi,quisimos ir cada una por nuestro lado, pero el público quiere ver a Azúcar Moreno, lo mismo sucede con Los Chunguitos.
Los problemas económicos entre ellos y su representante, son el motivo de la separación los dos hermanos que han llevado el asunto a los juzgados y que solo el tiempo dirán si se reconcilian y siguen los pasos de sus hermanas. De momento Toñi prefiere ser cauta y prefiere no desvelar detalles que seguro conoce de primera mano: "Ellos contarán todo cuando llegue el momento".