Naím Thomas, de concursante de Operación Triunfo a "golfo desefrenado"
Seis amigos se reencuentran tiempo después. Sus vidas han cambiado. Incluso algún sexo. Lo que llaman los modernos el tercero. Algo que nació décadas atrás sin mucho bombo y menos platillo.
Actores y actriz del musical
Vida, color, música, recuerdo, música, añoranza y mucho baile. Son los ingredientes principales del nuevo espectáculo que se ha estrenado en Madrid esta última semana. El Musical de los 80 y 90 nos lleva a otra época. A otro lugar. A otro escenario. Desde Los pajaritos de María Jesús y su Acordeón hasta A quién le importa, el mítico himno de los años donde ser diferente tenía un peaje. El tema de tiene especial importancia en este nuevo espectáculo que se puede ver en el Teatro Amaya de Madrid de miércoles a domingo.
Seis actores dan vida a seis amigos que se reencuentran tiempo después. Sus vidas han cambiado. Incluso algún sexo. Manolo ya es una mujer. Lo que ahora llaman los modernos el tercer sexo. Algo que nació décadas atrás sin mucho bombo y menos platillo. Más realidad y menos pancarta y panfleto político.
El concursante de Operación Triunfo, Naím Thomas es uno de los protagonistas. Encarna al joven que fue "golfo desenfrenado" y que el tiempo no le ha hecho cambiar. O sí. Eso se resuelve durante el desenlace del musical. La presentación y el nudo son las primeras partes donde tiene lugar todo. Incluso el homenaje a las grandes músicas de otro tiempo que tiene vigencia en las noches de los fines de semana de nuestra nueva movida.
Naím Thomas, de concursante de Operación Triunfo a "golfo desefrenado" from ESdiarioTV on Vimeo.
El musical de los 80 ha sabido ocupar el lugar que durante años fue el templo del actor Arturo Fernández. El asturiano congregó durante décadas a su público que dirige magistralmente Alberto y David Blasco. El público que antes reía con Fernández ahora quiere bailar, cantar y disfrutar con este musical.
Los estereotipos de los años 80 llega al teatro. Varias décadas después todo vuelve a ser actual. La libertad, el libertinaje, el sexo sin amor, el amor sin sexo, la vida y los reencuentros. 20 años no son nada ni para Nacho Guevera ni para la música del ayer que triunfa en la calle General Martínez Campos de Madrid.