Rocío Flores Carrasco, la víctima de muchos “verdugos”
Sus palabras de desencanto han podido no ser entendidas por muchos lectores. Incluso profesionales de la información. Había necesidad de continuar con el bando de los buenos y los malos.
Rocío Flores se convirtió en protagonista el día que Olga Moreno rompió su silencio.
La hija de se ha convertido nuevamente en el centro de la noticia. Miércoles. Revista Semana. Olga Moreno concede una exclusiva hablando de su sentimiento y situación sentida y vivida en los últimos meses. El centro es Olga Moreno. Horas después, la protagonista es otra. Las palabras de Flores Carrasco la sitúan en el centro de la diana. Sus palabras desbancan la entrevista de la que ha sido su verdadera madre en los últimos años. Ya hay dos protagonistas.
Las palabras de la nieta mayor de Rocío Jurado se convierten en la segunda parte de la entrevista de la última mujer de su padre. De momento, sigue siendo su mujer. A la espera de decisiones matrimoniales para disolver ese matrimonio. El tiempo tiene la última palabra. Rocío Flores Carrasco habla desde la sensatez y con la argumentación motivada de una persona cuerda.
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En El Programa de Ana Rosa asegura que no entiende la entrevista de Olga Moreno. No tanto por el contenido y el derecho que tiene a hablar sino por la forma en la que ha acaecido la información. Flores Carrasco va lejos aunque hay a quien no lo quiere entender.
Argumenta que no es lógico que manteniendo la relación que tiene con ella no fuese conocedora de esta exclusiva habiendo coincidido el pasado domingo en la celebración de cumpleaños de su padre. Lo más coherente hubiese sido que no asistiese.
Rocío Flores no critica el contenido de la entrevista de Olga Moreno sino el continente
A no ser que hubiese sido necesario por cuestión de guión. Fue Rocío Flores quien organizó esa fiesta de cumpleaños con las personas más cercanas a su padre. Entre ellas, su abuela paterna y Olga quien desde hace años ha ocupado el lugar de su progenitora materna. Esa es la decepción para la hija de Antonio David. Rocío Flores repite que no entra en el contenido de lo afirmado por Moreno. Se queda en el continente. En la forma de hacer las cosas. Quizás sea la doble moralidad de su madrastra lo que la deja desubicada a la protagonista por extensión del miércoles.
La ganadora de tiene todo el derecho a hablar. Como han hecho los demás. Todos. Sin distinción. Otra cosa es que el vínculo establecido entre hija y "madre" se ha visto dañado por la poca confianza que ha podido tener Olga con Rocío a raíz de publicación de esta exclusiva. Y aún más cuando compartieron un día juntas después de la realización del reportaje. La entrevista tiene lugar el sábado y el cumpleaños en Málaga es el domingo. El vienes tuvo lugar la otra celebración de David con Marta Riesco. Aquí hubo menos boato y más fotografía.
Las palabras de desencanto de Flores han podido no ser entendidas por muchos lectores. Incluso profesionales de la información. Había necesidad de convertirla de nuevo en verdugo y continuar con el bando de los buenos y los malos. Sin ser Paul Preston. Se convertía en víctima frente a muchos "verdugos". Algunos no lo han hecho intencionalmente pero el resultado es uno. El fin de semana todos jugaban a "ser muy cómplices" de un día tan importante para el padre, el aún marido y el hijo. Todo parece. La realidad este miércoles mostraba la cara de otros que han dejado a Rocío Flores Carrasco en la peor de las situaciones. Quizás hay objetivo marcado de nuevo.