María del Monte “normaliza” la homosexualidad

La noticia de la “salida del armario” de la sevillana ha copado muchos titulares desde el pasado jueves cuando anunciaba su relación de 23 años en el pregón del Orgullo de la ciudad de Sevilla. María del Monte aseguraba que no era un robot y que tenía su propia familia. Y fue Inmaculada Casal quien subió al escenario para dar visibilidad a la relación una vez que su pareja la invitó a subir al escenario.

María del Monte no ha estado en ningún armario. La artista no ha escondido su relación. Sus amigos, sus gente y sus más cercano conocen la relación desde hace años. Tantos como años lleva la cantante con la periodista de Canal Sur. Anoche María del Monte entraba por teléfono en el programa 'Sálvame Deluxe' para dar normalidad a la noticia. Del Monte accede al programa por la estrecha relación que mantiene con la colaboradora María Patiño.

María del Monte no quiere convertir esta noticia en un arco de iris de con muchas interpretaciones. La cantante asegura que nunca se ha escondido. Así ha sido. Ha contado siempre lo mismo. No se ha inventado otros amores de otro género. Una cosa es esta y otra es su Derecho a la Intimidad. Un Derecho Fundamental y personalísimo. ES ella y únicamente ella quien tiene que hablar de qué siente y cómo lo hace. De momento tan sólo ha contado con quién lo hace. Lo demás sigue siendo parcela de su parte más íntima. Hace años, los juzgados le dieron la razón a Maria del Monte frente a Charo Reina por jugar con la sexualidad de la artista de “salta la rana”.

Del Monte asegura que no se ha sentido discriminada por terceros por ser lesbiana. Reconoce que ha podido sufrir las diferencias por ser mujer. Lejos de su condición sexual. En el programa se intentaba buscar los titulares de la discriminación y la otra España. María del Monte no va en esa línea. Y lo deja claro. Aquí no hay polémica.

De la misma manera que no la hay en la bandera que no se va a poner en el Ayuntamiento de Madrid cuyo mayor representante es José Luis Martínez-Almeida. No se pone no porque se quiera meter al colectivo LGTB en el armario. Es el argumentario de la izquierda y del grupo principal de la oposición Más Madrid. Es por un tema legal de la cúpula del Poder Judicial. No se puede poner la bandera por sentencia del Tribunal Supremo desde hace 2 años. No es un tema de la “rancia derecha” como hace creer la “moderna izquierda” como dicen ellas y ellos (y elles).

Les toca la pancarta y la protesta porque la legalidad les parece “resbalar”. Más allá de que la iluminación de la Fuente de La Cibeles sea más moderno, diferencial y espectacular que la bandera de siempre. La España de la banderita ahora la portan otros. Con la iluminación la bandera se percibe más grande y ostentosa. Eso es otro tema para el partido de Mónica Garcia y Rita Maestre (Unidas Podemos y Más Madrid). A estos partidos y a sus cabezas visibles no le interesas este tema, están volcadas en el ruido mediático aún constituyendo una ilegalidad. Es lo que les queda.