Rosa Benito y Amador Mohedano hacen “piña” y se la devuelven a Rocío Carrasco

Nuevo capítulo en la guerra brutal entre Rocío Carrasco y la familia Mohedano. Y en este caso, le ha tocado a esta última parte el turno de respuesta. Y es que Rosa Benito y Amador Mohedano se han unido en el plató de “Déjate querer” en Telecinco para responder a los ataques de Rocío Carrasco en su docuserie “En el nombre de Rocío”.

Y es que delante de la presentadora, Toñi Moreno, Amador Mohedano no se ha cortado y ha opinado sobre las declaraciones de Carrasco diciendo que la familia Mohedano solo quería a Rocío Jurado por el interés y la herencia tras su muerte: “Escucho lo que escucho y me da tanta rabia… ¿Qué está pasando? ¿Esto qué es? ¿A qué viene? ¿Por qué?”.

A lo que ha acompañado diciendo que le duele la situación “porque es mi sangre y está hablando de una cosa que yo he idolatrado e idolatraré toda mi vida". “Solo he vivido para eso. Hemos sido una familia que se ha preocupado porque todos estemos bien”, ha señalado Amador Mohedano.

“Me hace daño desde el primer momento, desde que veo que está hablando de una forma tan despectiva, ya empieza a dolerme todo el cuerpo y a pensar… Yo no tengo miedo, tengo la conciencia tranquila, igual que mi hermana Gloria. Hemos estado pendiente de Rocío Jurado toda la vida”, ha recalcado Amador, respaldando con fuerza a Gloria.

Unos ataques de Rocío Carrasco que Amador Mohedano quiso devolver: “Es ella la que tenía que haber querido mejor a su madre y haberle dedicado tiempo. Ella siempre ha estado apartada de la madre, diga lo que diga. Rocío se quejaba de que su hija pasaba de ella. Ella se sentía segura y bien estando con su familia. No sé a qué viene todo esto. Es tener mala uva”, ha espetado.

Unos ataques a los que se ha sumado Rosa Benito, quien ha dado su opinión sobre la afirmación de Rocío Carrasco de que la Jurado no estaba realmente enamorada de Ortega Cano y que nunca se tendría que haber divorciado de Pedro Carrasco: “Su boda con Ortega Cano no fue un error. No tenía necesidad de casarse, pero ella era tan religiosa que creía que estaba pecando. Ella fue muy feliz el día que se casó con José”.

“No tengo nada que demostrar a gente que no me conoce. Las redes son dañinas, pero también sirve para desahogarse y poner momentos de tu vida y ver si alguien por ahí capta algo. Yo me siento bien, creo que con lo que digo, digo bastante. Parece que ahora que todo es malo, todo por conveniencia… No. Solo ha habido mucho amor, respeto y unión familiar”, ha terminado por zanjar.