La noche marbellí de Raphael: y no estaba solo

10 de Agosto. 22 horas. Raphael llega a la ciudad malagueña de Marbella y a su festival de música más internacional 'Starlite' en el Auditorio de Marbella. Una vez más, Raphael no está solo. El cartel de no hay billetes se cuelga. Un auditorio de 3000 personas que aplaude a su ídolo. Varias generaciones. Familias con el abuelo, el hijo y el nieto. Derecha e izquierda. Es el artista que canta para todos en cualquier rincón de España. Sigue siendo aquel, el cantante preferido de Carmen Polo y el artista que llenaba plazas en Rusia en tiempos diferentes a los de ahora. O quizás muy parecidos.

120 minutos de actuación. Sin telonero. Ni descanso. Aquí no hay duetos. Aquí es Él. El Niño de Linares que con meses llegó a Madrid con sus padres a una casa prestada de sus tíos. Allí comenzó la historia del hombre que ayer fascinó de nuevo al público de la Costa del Sol y a las gentes de 'Starlite'.

43 canciones. Sus clásicos con tintes modernos donde la tecnología actúa. Pasado y presente se aúna en este Raphael 6.0. 60 años sobre los escenarios. Fue una de sus canciones la que mayor fervor generó entre los asistentes. 'Amor mío' es un clásico de su repertorio que no deja de provocar que el público se levante de sus butacas.

Curiosamente es una de las canciones favoritas de la mujer de Raphael, Natalia Figueroa y mas curiosamente fue ayer cuando Natalia Figueroa cumplía 83 años. La hija del Marqués de Santo Floro lo celebró con su familia en Ibiza en la zona de San José donde el matrimonio posee desde hace unos años “su propio paraíso” como lo denomina Figueroa.

Este pasado 14 de julio, el matrimonio ha celebrado sus bodas de oro. Y anoche Raphael un nuevo éxito en Marbella. Se fue diciendo que no sería la última vez.