Kiko Hernández, Lydia y Patiño casi se ahogan en un programa mexicano

Las estrellas de Sálvame ya han recalado en México tras dejar atrás su comentado paso por Miami dentro de la gira por el continente americano que están realizando como preludio del nuevo programa en streaming que pronto tendrá Netflix en su plataforma

Los nuevos empleados de Netflix (Belén Esteban, Kiko Matamoros, María Patiño, Kiko Hernández, Lydia Lozano, Chelo García Cortés, Terelu Campos Víctor Sandoval y Kiko Matamoros) están sacando todo su arsenal de recursos para no pasar desapercibidos y crear las expectativas suficientes en el público latinoamericano para que el estreno de su próximo programa continue el éxito que cosecharon en Telecinco de la mano de Sálvame

Los conocidos colaboradores están apareciendo en programas de entretenimiento y chismorreo de cadenas hispanohablantes de gran audiencia tanto en Miami antes como ahora en México.

Sus formas de intervenir en los programas están llamando poderosamente la atención en esos países. Todo es excesivo, incluso más que en España. Su última participación en Viva Lavi, de Canal 6, ha tenido ingredientes de masoquismo, circo y sinceridad a la hora de volver a abundar en cómo se enteraron de fin de Sálvame.

María Patiño, Kiko Hernández y Lydia Lozano aceptaron el reto de masticar un chile temiblemente picante en el programa mexicano de las mañanas presentado por Luisa Fernanda y "casi mueren" en el intento.

Lo cierto es que no pudieron reprimir las lágrimas por el picante y sus caras lo decían todo. A María Patiño no le daban los ojos para buscar un vaso de agua, mientras la presentadora Luisa Fernanda le hacía una recomendación mejor: “Lechita, toma lechita”.

Menos mal que el programa mexicano les tenía preparados vasos de leche para tratar de paliar los efectos del picante.

Pero ahí no quedó la cosa, Kiko y María se pusieron unos uniformes de cocinero y pasaron a una cocina improvisada en la que, con las caras como un cromo manchadas de harina y salsas, elaboraron una especie de receta que incluía chile. Le tocó probarlo a Hernández que volvió a pasarlo de colores: “¡Que me ahoooogoooo!”, gritaba el colaborador.

Sin duda, puro entrenamiento al estilo Sálvame, que animaron al reparto de colaboradores mexicanos en un programa en el que no daban crédito con la valentía de los españoles y, también, de su inocencia ante un reto del que se acordarán toda la vida. El periplo mexicano de Sálvame se pone caliente...