Un vídeo de Ana Rosa Quintana y una foto de la autopsia complican el caso Biondo
Una vez estrenada la polemiza docuserie de Netflix sobre la muerte del cámara y pareja de Raquel Sánchez Silva, ahora llega un encendido debate en las redes con datos que lían el asunto.
Se ha convertido en la noticia del verano: una llamada telefónica a Santina para informarle de que Mario Biondo no estaba solo cuando murió. Así arranca uno de los teaser de Las últimas horas de Mario, la esperadísima docuserie que Netflix ya ha estrenado. La intrigante voz al otro lado de la línea, digna de película policíaca, le dice lo siguiente a la madre del cámara italiano: “Señora D’Alessandro, usted no me conoce, soy el representante de una empresa tecnológica de Estados Unidos. La llamo porque tenemos pruebas de que la noche que murió su hijo había al menos dos personas en la casa. Santina, su hijo no estaba solo”.
Y, una vez estrenado, el documental que aborda la muerte de Biondo, los medios de comunicación hemos ‘rescatado’ los momentos de ese trágico fallecimiento y toda la polémica suscitada posteriormente por la guerra entre la presentadora Raquel Sánchez Silva y su familia política.
El debate se ha trasladado ahora a las redes sociales. Biondo, Sánchez Silva, la docuserie de Netflix… son tendencia desde hace días y allí tienen cabida todo tipo de opiniones y versiones de lo que realmente ocurrió en la muerte del cámara de televisión.
Ana Rosa Quintana y Raquel Sánchez Silva
En las redes, tal y como ha podido comprobar ESdiario, las opiniones son diversas pero predominan las que apuntan a algún tipo de responsabilidad hacia la que fuera pareja de Biondo hasta su fallecimiento. Hay un tuit especialmente llamativo en el que aparece Ana Rosa Quintana en una conexión en directo con Sánchez Silva cuando reaparecía en televisión tras pasar el duelo de la muerte de su marido.
Dice el tuit que con escuchar las palabras de la presentadora respondiendo a Ana Rosa “no haría falta juicio”. Y es que Raquel Sánchez Silva da imagen de frivolidad aprovechando la coyuntura para hacer publicidad de una marca de teléfonos móviles.
Pero, sin duda, quien más ha impacto con su análisis del documental y del suceso es Óscar Tarruella. El criminólogo y ex policía judicial es una de las pocas personas en España que busca demostrar que Mario fue asesinado.
Tarruella está muy activo en las redes comentado todo acerca del caso Biondo pero un tuit en particular es especialmente significativo y muy duro. En él muestra una fotografía de la autopsia del camarógrafo, concretamente de las heridas en la parte posterior del cuello.
Él lo explica así: “Esta imagen puede herir su sensibilidad, pero no me queda más remedio. Esta foto de la parte posterior del cuello de Mario sólo es compatible con una estrangulación completa mediante la técnica de lazo y por ende se trata de una ejecución”.
En definitiva, la polémica no cesa y eso que ya se han cumplido más de 10 años desde que Mario Biondo falleciese el 30 de mayo de 2013 en Madrid.