Alfonso Merlos mete un palo póstumo a Sálvame que deja tiritando su productora
El periodista y colaborador político, rostro habitual de Telecinco durante un tiempo, se convirtió en carne de corazón y prensa rosa durante semanas en un culebrón morboso a tres bandas.
Durante muchas semanas seguidas y en plena pandemia por el Covid 19 el denominado Merlos Place se convirtió en uno de los grandes culebrones corazoneros alimentados por el universo Sálvame en Telecinco.
El hoy extinto programa se volcó de lleno en la vida privada de Alfonso Merlos (colaborador de algunas de las tertulias políticas de Mediaset) después de que se desatara el escándalo en redes sociales porque en un directo del programa online Estado de Alarma en el que participaba el periodista salió paseando por detrás la también periodista y colaboradora de Telecinco Alexia Rivas en bikini.
Si al cóctel se suma que entonces Merlos mantenía una relación sentimental oficial con otro peso pesado de la cadena, Marta López, el lío estaba servido y en diversos programas se habló de una posible infidelidad. En el caso de Sálvame, Sábado Deluxe o Socialité la cosa fue mucho más allá a la hora de entrometerse en la vida del comunicador y su historia llegó incluso a la televisión estadounidense.
Años después de que Merlos denunciara y con Sálvame y los demás formatos de La Fábrica de la Tele fuera de la parrilla de Mediaset ahora la Audiencia Provincial de Madrid condena a pagarle 800.000 euros por "una intromisión ilegítima continuada en el derecho al honor y a la intimidad personal y familiar", según adelantó OK Diario.
La sentencia da la razón a Alfonso Merlos y se muestra muy dura con La Fábrica de la Tele
Además el texto de la sentencia reprueba los calificativos con los que la productora de Óscar Conejo y Adrián Madrid permitió que se refirieran a él: "Se le calificó de clasista, cobarde, tonto útil, incívico, mentiroso, antiguo, machista, infiel, traidor, hipócrita, sinvergüenza, gañán, y cateto".
"El visionado de los programas, aplicando la doctrina, evidencian que la cadena propició, alentó e incitó el pronunciamiento de expresiones referidas a Merlos que rebasan claramente el ámbito de la crítica, carecen de justificación objetiva, resultan manifiestamente ofensivas e indudablemente lesionan la dignidad del actor y menoscaban su fama", alegó la Fiscalía.
Según el fallo judicial, se "propició, alentó e incitó la revelación y difusión de hechos privados relativos a la vida íntima y personal del demandante, que afectaban directamente, y resultaban completamente carentes de todo interés público".