Regalo envenenado en la lujosa ‘boda roja’ de 3 días de Garzón y Dolores Delgado
La pareja contraerá matrimonio este fin de semana en una celebración privada y exclusiva que arranca el viernes y concluye el domingo. Pero no todo son alegrías…
Dolores Delgado y Baltasar Garzón.
Dolores Delgado y Baltasar Garzón celebran este fin de semana (de viernes a domingo) un enlace matrimonial que ya se firmara en diciembre de 2023. La pareja, sin embargo, quiere celebrarlo ahora con amigos por todo lo alto y en una fiesta exclusiva y de gustos caros.
Pero, tal y como recoge Vanitatis, la celebración viene empañada por una decisión judicial que afecta directamente a la pareja y que, a buen seguro, será motivo de conversación entre los invitados: Delgado ha vuelto a los titulares precisamente por su condición de 'pareja de'. El Tribunal Supremo ha tumbado su nombramiento como fiscal de Sala de Memoria Democrática y uno de los argumentos es que podría influir que su pareja sea precisamente el ex juez Garzón.
La pareja, tal y como ya les hemos contado en ESdiaro, se casa en la finca La Cetrina, propiedad de Enrique Ponce, un lugar famoso porque allí vivió el torero con su ex mujer, Paloma Cuevas, durante mucho tiempo. Al parecer, según han informado algunos medios, fue el padre de Ana Soria, actual pareja de Ponce, quien recomendó el lugar a su amigo Baltasar Garzón.
Garzón, Delgado y sus invitados
Antes habrá una fiesta preboda en los alrededores. Los invitados llegan, entre otros Víctor Manuel y Ana Belén, de todas partes del país y los novios les agasajarán con al menos tres comidas: la cena del viernes, y el almuerzo y cena del sábado.
Es posible que asista también el cantante Joan Manuel Serrat y confirmados invitados como Álvaro García Ortiz, el reprobado Fiscal General del Estado o los jueces Fernando Andreu y Santiago Pedraz.
La Cetrina, lugar elegido por la pareja para las celebraciones de su boda, ubicada en la localidad de Las Navas de San Juan (Jaén) cuenta con 904 hectáreas, donde hay un edificio de tres plantas (420 metros cuadrados cada una), un jardín, una piscina y hasta una plaza de toros. Todos quienes se desplacen allí para la celebración serán recibidos por los contrayentes con una cena el mismo viernes. El recinto se suele alquilar por unos 5.000 euros la jornada.