Un manotazo de la Reina Letizia a Doña Sofía calienta el verano de la Familia Real
La periodista Pilar Eyre aviva la vieja polémica con el análisis de unas imágenes que podrían demostrar que las malas relaciones entre las dos reinas
El Rey Felipe VI ya acompaña a la Reina Letizia en el Palacio de Marivent, la residencia habitual de verano de los monarcas donde alternan días de asueto con actos y recepciones oficiales.
Precisamente, este lunes 29 de julio, un año más, el Palacio de Marivent abría sus puertas para celebrar la tradicional recepción a las autoridades y a una amplia representación de la sociedad balear que ofrecen los anfitriones, Don Felipe y Doña Letizia y, en esta ocasión, acompañados por la Reina Sofía.
Del tradicional acto ha llamado la atención otro hecho que ha demostrado que la Reina no está recuperada de su dolencia en sus pies. Una realidad que se hacía evidente cuando se apoyaba en un taburete durante el saludo a los 600 invitados al palacio mallorquín.
En las últimas recepciones, esta se ha convertido en una práctica habitual en algunas de las apariciones de la Reina Letizia. Cuando el acto implica que tenga que estar bastante tiempo de pie, doña Letizia siempre tiene a mano un taburete para poder apoyarse o sentarse y aliviar las dolencias del Neuroma de Morton. A veces hace uso de él y a veces no, pero en la cena celebrada en el Palacio de Marivent sí que se ha apoyado y ha vivido desde ahí el besamanos que ha durado más de media hora.
Letizia y Sofía, el gesto de la discordia
Sin embargo, hay otro detalle que ha quedado oculto y que ha puesto de manifiesto Pilar Eyre, al menos es la lectura de un momento concreto, de un gesto, que destaca y analiza la veterana cronista de las Casas Reales.
Según Eyre, ambas tratan de disimular en pública la animadversión que sienten y lo disimulan bien pero hay cosas inevitables:
“Hay un momento en que la manos de las dos se encuentran y, entonces, la Reina Sofía cariñosamente intenta cogerle la mano a Doña Letizia para quedarse un buen rato con la manos cogidas. Letizia se suelta con cierta brusquedad. Entonces, la pobre Sofía se queda con la mano desangelada, a medio camino, no sabe qué hacer...”, cuenta la periodista catalana en su canal de YouTube.
Es inevitable acordarse de la máxima tensión vivida entre ambas reinas durante la celebración de la misa de Pascua en abril del año 2018. Doña Letizia y Doña Sofía forcejearon en público, en la Catedral de Palma, por culpa de una foto que la Emérita quería hacerse con sus nietas, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía.
Pilar Eyre remata en su canal de la plataforma de vídeos:
“Es evidente que Letizia y Sofia no se llevan bien. Posan, pero el resto del tiempo ni se ven ni se dirigen la palabra. Sofía lo ha comentado en la intimidad de su familia. El trato que tienen esta limitado al momento en que hay fotógrafos”.
Chismógrafo
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