El último deseo que pidió Lina Morgan y que no llegó a cumplirse

Hoy 19 de agosto hace nueve años que se fue para siempre María de los Ángeles López Segovia, conocida popularmente por Lina Morgan. La última cómica del siglo XX que hizo de su personaje una carrera llena de éxitos. El pueblo la admiraba. Colas y colas en su Teatro de la Latina para verla actuar con las las revistas que fueron aplaudidas por millones de personas.

Lina Morgan construyó un emporio económico junto a un cerebro empresarial que eran su hermano José Luis y su hermana Julia, la tercera pata de la silla que se encargaba de la intendencia de la familia. Los tres hermanos juntos formaron su propia familia. Ninguno contrajo matrimonio ni tuvieron descendencia. La primera muerte de Lina Morgan se produce el 25 de noviembre de 1995 con el fallecimiento de su hermano José Luis. Nunca la superó. Era el amor de su vida. 

José Luis fallece de SIDA. La madrileña cómica triunfa en aquel momento en el teatro. Muestra dos caras. Cuando sube el telón se debe a su público y cuando las luces del escenarios se apagan, se arropa junto a la cama de su hermano para pasar con él los últimos días de su vida. Lina Morgan si le confesó a algun amigo periodista la enfermedad de su hermano. No fue tan hermética como algunos han querido mostrar de ella. Entre ellos, su chófer y heredero universal Daniel Pontes a quien le cambió la vida cuando se descubrió el testamento. Nueva casa, nuevo coche y horizontes totalmente diversos para invierno y verano.

Lina Morgan el 19 de agosto de 2015 deja un imperio. Un impresionante piso en la calle Samaria número 12 en el barrio del Niño Jesús en Madrid. La mayor colección de joyas que pudo soñar una actriz o artista de otra época. Y cientos de abrigos de visón. Las pieles fueron una de sus grandes pasiones de "la tonta del bote". 

Muchas de estas prendas fueron casi regaladas en un mercadillo de Alcorcón. Lugar donde vive Daniel Pontes y su familia. Las joyas fueron vendidas, o malvendidas. Y actualmente otras de estas piezas de oro y que más le gustaban a Lina Morgan, unos elefantes con la trompa hacia arriba, las lucen algunas de las hijas de Daniel Pontes. Una de sus hijas es un personaje público. Durante ocho años fue concejala del ayuntamiento de Alcorcón. Primero con el Partido Popular de 2015 a 2019 y en la segunda legislatura renuncia a su acta para formar parte de la lista de Ciudadanos. Al sol que más calentaba o a caballo ganador. En 2023 sale del gobierno aún con el elefante colgado en su cuello.

Lina Morgan decide vender el Teatro de la Latina en 2007. Tuvo varias ofertas. Una de ellas de empresario y presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo. Llegó tarde. Fue vendido al empresario Jesús Cimarro, un hombre de teatro que consiguió hacer el gran imperio teatral en Madrid y fuera de la capital. Más de siete millones de euros fueron entregados a la cómica. Lina Morgan confiaba en Cimarro. Y Jesús le prometió que su palco no sería utilizado para la venta de público y tan sólo sería utilizado por ciertas personalidades.

El nuevo propietario cumplió su palabra. Lo otro que pidió Lina Morgan fue que el despacho de su hermano José Luis que se ubicaba en la mejor zona del teatro La Latina nunca sería desalojado. Durante años fue así. Hace un tiempo, Daniel Pontes lo reclama y se lo lleva del teatro. Fue instalado en su domicilio de Alcorcón. ESdiario desconoce si en los últimos meses ha sido vendido. Pontes ha decidido no hablar en este último año. El último deseo de Lina Morgan que no se cumplió.