El infernal traslado de Daniel Sancho y el soborno millonario para su sentencia

Comienza el nuevo infierno para Daniel Sancho, tras la condena y con una pena de cadena perpetua por el asesinato de Edwin Arrieta, no puede continuar en la cárcel de Koh Samui, donde solo hay presos con un castigo que no supere los 15 años, así que este pasado jueves la defensa confirmaba que sería enviado a otro centro penitenciario tras la negativa del juez a una petición de Daniel para quedarse en la prisión en la que ha vivido el último año.

Ahora, la agencia EFE confirma en palabras del propio Daniel que el traslado será "inmediato" y las autoridades han informado sobre cómo será ese viaje hasta Surat Thani, a 100 kilómetros de la isla en la que ha permanecido desde que fuera oficialmente detenido, el 7 de agosto de 2023. Será allí donde espere la resolución de los próximos recursos de sus abogados, que empezarán a trabajar en ese escenario cuando reciban la sentencia y puedan evaluar cuáles han sido las pruebas practicadas.

Las condiciones cambian radicalmente para Daniel, ya que se trata de una prisión con condiciones extremas y más de 5.000 reclusos. Es una cárcel peligrosa pero algo más amable de lo que podría ser su destino final tras finalizar el periodo de apelaciones: la cárcel de Bang Kwan en Bangkok, conocida como El gran tigre o El Hilton, tal y como les hemos informado en ESdiario. Este recinto penitenciario está considerado como uno de los más peligrosos y duros del mundo.

El supuesto soborno: para empezar 30.000 euros

Y, mientras tanto, nuevas polémicas golpean el caso. Según información de El Confidencial, una mujer tailandesa se puso en contacto con Rodolfo Sancho. Era una persona que ya conocía al actor y cercana a su entorno durante los meses que ha estado librando la batalla judicial con el caso de su hijo. Es esta mujer la que transmite la oferta al padre de Daniel Sancho. Un primer pago de 30.000 euros que debían hacer frente tanto él como su ex pareja, Silvia Bronchalo. Todo para conseguir una sentencia favorable a Daniel por el soborno al tribunal que librase al joven cocinero de una dura sentencia.

El objetivo era utilizar los supuestos contactos de un ciudadano de origen ruso en la judicatura tailandesa para lograr una sentencia favorable. El entorno desconfió desde el primer momento. No solo la cantidad que solicitaba este supuesto contacto era demasiado baja para un caso tan mediático, sino que la falta de seguridad en toda la operación hacía pensar que se podía tratar de una estafa.

Reza el medio que Sancho escuchó la oferta aunque se desconoce si la familia realizó otros contactos tras es oferta inicial. Carmen Balfagón, portavoz de la familia, niega cualquier actuación en ese sentido. “Es absolutamente falso, no ha habido nunca un ofrecimiento de esa índole. Si lo hubiéramos tenido, lo hubiéramos descartado en el minuto uno”, afirma el citado portal.