Cayetano Martínez de Irujo se sincera sobre la relación con sus hermanos
Cuando se cumplen diez años del fallecimiento de la Duquesa de Alba, el hijo menor explica en una entrevista para "Dinastías" en qué punto se encuentra la situación de sus herederos.
Cayetano y Eugenia Martínez de Irujo siguen distanciados tras la muerte de su madre
Cayetano Martínez de Irujo ha concedido una entrevista exclusiva a Dinastías, el nuevo programa de Joaquín Prat, en el que, como es habitual, no ha tenido reparos en desvelar los detalles de la controvertida situación familiar que viven desde el fallecimiento de la Duquesa de Alba, hace casi una década.
La actual relación de Cayetano con sus hermanos no era la mejor cuando vivía su madre y parece que no ha mejorado. El jinete se ha sincerado ante las cámaras de Telecinco para explicar cómo se lleva actualmente con cada uno de sus cinco hermanos: "Los celos y la envidia, o se tratan psicológicamente, o se pudren en el odio y uno no puede vivir con el odio", comienza su entrevista, como augurio de la realidad que comparten.
Su hermana, la gran decepción
"Fui el escogido por mi madre para llevar la casa, eso es todo el mal que hice. Cuando el problema no es tuyo, sino que no tiene solución, pues es mejor seguir tu camino y ya está... sin ningún reproche", confiesa un molesto Cayetano, que no ha superado sus diferencias en estos años.
La relación con su hermano Carlos Fitz-James Stuart no ha mejorado: "Tengo una relación cordial y correcta en la medida que cabe. Me senté con él y le dije todo lo que quería decirle, y bueno... no conseguí lo que esperaba pero, por lo menos, me quedé satisfecho de sentarme con él y que me escucharse. Tengo una relación cordial y así la quiero mantener", explica al programa de Mediaset.
Con quien reconoce haber sufrido un duro varapalo es con su hermana Eugenia: "Con Eugenia, bueno, han conseguido llevársela de su lado. Han pasado cosas feas por eso ha sido una decepción muy grande. Cuando alguien me hace una injusticia flagrante y, además, no quiere ni sentarse a hablarla... Para mí ha terminado", declara dolido, pues siempre ha sido su debilidad y tenían una gran complicidad que ya no existe.