Las bolsas de basura, millones de euros y el Mercedes arruinan el adiós de Julián Muñoz

Dicen quienes conocían bien a Julián Muñoz que ha muerto “arrepentido” de su paso por la política y, sobre todo, por la alcaldía de Marbella, andanzas marcadas por la más grosera corrupción. Eran los años de oro del ladrillo en la capital de la Costa del Sol y Jesús Gil, Muñoz y compañía sacaron tajada económica a base de comisiones, prevaricación… Millones de euros que hicieron ricos a los implicados y que en el caso de Julián Muñoz fue muy llamativo porque pasó de servir mesas a ser millonario y ostentar todo el poder.

El Julián Muñoz que conocemos, gracias primero a la política y después por su sonado y polémico romance con Isabel Pantoja, es un cúmulo de corruptelas televisadas. Sin pudor alguno Gil y él expusieron la trama en televisión, en vivo y en directo en Salsa Rosa, un programa de Telecinco que entonces presentaba Santi Acosta.

Pero hay muchos más ‘muertos en el armario’ del ahora fallecido ex alcalde. Otra de las icónicas desvergüenzas de Julián Muñoz y que da una idea del nivel de corrupción que dominaba la actuación política del ex primer edil marbellí la conocemos por su mujer, ex mujer y de nuevo mujer, Maite Zaldívar.

Ella, en pleno ataque de cuernos cuando Muñoz rompió el matrimonio para irse con Pantoja, revelaba un caso escandaloso que generó ya alarma social: las bolsas de basura llenas de dinero y el coche de lujo.

Maite Zaldívar 'cantaba' en Telecinco

Zaldívar, con mucho despecho, intervenía también en Telecinco para contar en A tu lado, el programa que entonces presentaba Emma García, para ‘cantar’ sobre el entonces alcalde. Corría el año 2004 y con total tranquilidad reconocía que de su vivienda salían bolsas de basura repletas de dinero. "Es un dinero que había en casa". García le preguntaba que si a ella esta circunstancia no le parecía extraña y Maite Zaldívar se justificaba afirmando que Julián le decía que "era normal... Unas comisiones de obras". Lo relató tal cual: "Me decía que eran comisiones de obra y en Marbella se hacen obras cada medio metro".

Del mismo modo, Zaldívar reconoció que esta etapa para ella también fue muy positiva porque su entonces marido le había hecho un impresionante regalo de cuatro ruedas: "Un Mercedes negro, nuevo, que vino de Alemania. De unos veinte millones de pesetas”, 120.000 euros de entonces que era una ingente cantidad de dinero.

La confesión de las bolsas de basura se convirtieron en el estandarte de esta corrupción marbellí y terminaron de cargarse la imagen de esa hornada de políticos de la Costa del Sol que en su día capitaneaba Jesús Gil y Gil.

Pero en 2018, años después ya con el despecho enfriado, Maite Zaldívar hacía ver que esas bolsas de basura llenas de dinero nunca habían existido y que había sido invención de una periodista, Marisa Martín Blázquez, cosa que la aludida (que estaba en esa entrevista) negaba.

El Tribunal de Cuentas estima que lo ‘robado” a las arcas municipales de Marbella supera los 40 millones de euros.