Risto Mejide sorprende con un inesperado vuelco en su vida sentimental y privada
Está siempre en lo más alto de los titulares y de la crónica, tanto mediática como televisiva y/o de la crónica rosa. Parece que se toma a pecho lo de renovarse o morir... metafóricamente.
Natalia Almarcha y Risto Mejide, sorprendente reconciliación veraniega.
Tras haber hecho pública hace varias semanas su ruptura a través de sendas publicaciones en Instagram en las que dejaron entrever que el fin de su noviazgo (que comenzó el pasado diciembre) no había sido amistoso, y en los que la sombra de la deslealtad planeó sobre el presentador,confirman que su reconciliación.
Mientras se especula con que la farmacéutica habría puesto condiciones al publicista para esta nueva oportunidad en su amor (como el hecho de reducir su alto ritmo de vida porque ella no podría costeárselo con su sueldo y pagan sus viajes y salidas a medias) la pareja hace oídos sordos a los rumores y ha reaparecido más enamorada que nunca.
Tras escenificar su reconciliación asistiendo juntos a la boda de Edurne y David De Gea en Menorca, en la que evitaron dejarse ver juntos ante la prensa, Risto y Natalia han puesto fin a su escapada a la isla balear tras unos días inolvidables y han regresado a Madrid para cumplir con sus compromisos profesionales.
Risto Mejide y Natalia Almarcha, reforzados tras el bache
Demostrando que su noviazgo ha salido fortalecido de este bache, la pareja abandonaba Menorca y aterrizaba en el aeropuerto de Barajas de lo más cómplices, aunque muy serios al descubrir la presencia de cámaras dándoles la 'bienvenida' y preguntándoles por esta inesperada segunda oportunidad a su historia de amor.
Tímida, y con la tensión de quien no está acostumbrada a estar en el foco mediático, Natalia (que lejos de apostar por la comodidad para el viaje presumió de figura con un ajustado mini vestido amarillo) intentaba huir de los reporteros ocultando su rostro bajo unas enormes gafas de sol, aunque no pudo evitar una sonrisa cuando le preguntaron por su felicidad con Risto. "Nos lo hemos pasado bien", confesó esquiva.
Algo tensa, se equivocó de camino en varias ocasiones, siendo el presentador de Todo es mentira en Cuatro, más cómodo con la situación, el encargado de guiarla hasta la salida del aeropuerto para coger un taxi de camino a su domicilio.
El ex de Laura Escanes, jugando al despiste, preguntaba a la prensa si "todo estaba bien" antes de asegurar que él también está "bien" aunque "con un poco de calor". "Buenas tardes, cuidaros mucho" añadía, sin revelar ningún detalle de su reconciliación ni contar cómo va esta segunda oportunidad.
