El llanto de Carmen Borrego no convence: no es Terelu, ni Barneda, es Igartiburu
La versión que ofreció la hija menor de María Teresa Campos en su nuevo proyecto laboral, al que llegó como la gran esperanza blanca, no es la que gusta al público. Muy al contrario.
El regreso de la hija menor de Teresa Campos lleva al programa Así es la Vida a uno de sus peores datos de audiencia desde su estreno el pasado 26 de junio. no ha convencido. El público dicta sentencia. En estos asuntos, siempre cabe recurso. El “recurso” de reconducir al personaje.
Carmen Borrego fue la protagonista durante toda la emisión del programa vespertino presentado por Sandra Barneda. Los colaboradores en las gradas como si fueran público pagado. Oyentes no intervinientes. Carmen lloró. Carmen habló. Carmen se “desnudó” ante la muerte de sus seres queridos pero no empatizó.
La Carmen que gusta no es esa. Terelu Campos es más creíble en el llanto y Carmen es estupenda en la guerra.
Carmen Borrego es espectáculo puro en la discusión y en la polémica
Carmen Borrego es espectáculo puro en su esencia. En la discusión. En la polémica. En la distancia. En el debate. A su aire, pero funciona. Algo que supo sacar a la perfección el programa Sálvame. Plató que transformó a un personaje. De directora a personaje.
Ahora es el antagonista que necesita Gustavo Guillermo para continuar con el espectáculo. No tiene filtros. Es directa. No tamiza ni maquilla. Es ella, en estado puro. La que llora no convence. Y menos cuando la presentadora deambula por los mismos sentimentalismos. Nada que ver con Carlos Sobera cuando intenta disimular su sentimiento ante una Lolita Flores que narra sus luces y sombras. Este miércoles sucedió.
Carmen Borrego se hizo popular mediáticamente con el payaso y la tarta. Se hizo grande cuando se enfrentó a los suyos. Floreció cuando todo era advenedizo. Consiguió ser “la más” cuando lo de enfrente era suave. De superó cuando dejó de lado su apellido. El segundo.
Carmen Borrego era la esperanza de Así es la Vida. No sucedió. Carmen Borrego funciona cuando existe contraparte en el plató. Sin embargo, este miércoles todo parecía Corazón, Corazón en un corto plazo de tiempo. Y no era. Era Barneda. No era Terelu Campos. Es Carmen Borrego.