Isabel Pantoja se revuelve y sorprende a propios y extraños con su último órdago
ESdiario ha podido acceder al documento privado del que todo el mundo habla en las últimas horas después de que la tonadillera haya vuelto a superarse a sí misma con una salida inaudita.
La Pantoja se encuentra en pie de guerra y piensa dar batalla judicial. Si a lo largo de las horas posteriores a la histórica entrevista de su hijo Kiko Rivera lo que nos llegaba de su entorno es que la tonadillera estaba literalmente “destrozada”, el tiempo ha pasado e Isabel ya está al tanto de todo lo que se está diciendo, aireando y afirmando en los medios de comunicación.
Su primera decisión ha sido la de dar orden de emprender cuantas demandas sean necesarias para que su honor permanezca intacto.
Su segunda decisión ha sido la de contestar al requerimiento notarial que recibió hace más de 48 horas en “Cantora”. Un requerimiento de bienes presentado por el abogado Joaquín Moeckel en el que se le instaba a devolver las cosas que Paquirri dejó a sus hijos mayores, Francisco y Cayetano. Pantoja no tenía obligación alguna de contestar, pero lo ha hecho a través de su abogado cuando la propia notaria se ha presentado en la finca de Cantora para conocer la decisión de la viuda de Paquirri.
La respuesta de Isabel ha sido inmediatamente publicada en exclusiva por su revista de cabecera. Gracias a ello hemos podido conocer que Pantoja no atiende a la petición de Francisco y de Cayetano y que piensa llegar hasta el final para conservar los recuerdos que aún siguen en Cantora.
Lo curioso de esta contestación es que, por primera vez, Isabel admite que realmente los trastos de torear de Paco se conservan bajo su custodia en la finca. Pero ha dado un paso más allá al reconocer que esos trajes y enseres personales aparecen en un documento privado “que no recuerda haberlo firmado”. Una contestación que ha descolocado a propios y a extraños.
Este diario ha podido acceder a ese documento privado que se firmó y se leyó ante todos los herederos, el mismo día en el que fue elevado a público el cuaderno particional de la herencia de Paco, un 24 de septiembre de 1987 en Sevilla. Ese día y en ese mismo despacho también se firmó un “documento complementario y rectificatorio del contenido anterior”.
Un documento en el que todos los herederos “dejan convenido la distribución de armas, alhajas, relojes, plumas, bolígrafos, monedas, medallas e insignias, ropa, utensilios, cabezas de toro, aperos y algún mobiliario”.
En dichos folios aparece claramente que los herederos acordaron que a los hijos mayores de Paco le correspondían un total de 7 trajes de torear, 2 capotes de torear, 2 camisas blancas, una capilla portátil con la Cruz de Caravaca, 2 cordones de oro y un crucifijo, las espadas y un descabello, además de 12 capotes y muletas. También les correspondió, una cabeza de toro de la beneficencia y varias más a repartir en lotes. Igualmente les correspondió una máquina de cine súper8, 2 tomavistas, 1 tabaquera con el nombre de su madre. Y aparece también el famoso fundón que el malogrado torero dejó específicamente en herencia a su hijo mayor. Fundón que Kiko le entregó a su hermano el día de su boda.
Este es un documento de varios folios en los que aparece claramente la firma de Isabel Pantoja Martín. Una firma que hoy Isabel, parece no recordar.
Una estrategia judicial difícil de sostener ya que esa rúbrica, se estampa ante el mismo notario en el que firma convertirse en la dueña de más de la mitad de Cantora, además de otros beneficios que obtuvo de la herencia del torero. Al parecer la tonadillera sólo habría perdido la memoria en lo referido a la voluntad de su marido respecto al legado que quiso dejar a sus hijos mayores.
ESdiario ha podido constatar que de momento Fran y Cayetano no saben que estrategia van a adoptar
Los focos ahora han girado hacia Francisco y Cayetano. Este diario en conversaciones con su abogado ha podido constatar que de momento no saben que estrategia van a adoptar. Su abogado siempre ha querido recalcar que la intención de los hijos mayores de Paquirri era la de poder llegar a un acuerdo amistoso con Pantoja. Un acuerdo que no contempla la cantante ya que con este movimiento ha dejado claro que no piensa dar ni un paso atrás en su decisión.
Por lo que podemos confirmar que aún quedan muchos capítulos por escribir de un culebrón que parece no tener fin.