Victoria Federica vuelve a presumir de “privilegios” y levanta ampollas en redes
Por más que se empeñan los Reyes Felipe y Letizia en mantener un perfil bajo y cuidar cada uno de sus actos para que no afecte a la Corona hay herederos en la sucesión que no ayudan.
Prácticamente no ha parado desde que comenzó la cuarentena pero una vez más Victoria Federica Marichalar de Borbón levantó ampollas esta semana con su decisión de volver a Madrid antes del fin del estado de alarma y con las limitaciones de movilidad interprovincial aún vigentes.
Vamos que se ha saltado las normas de la movilidad de obligado cumplimiento para el común de los mortales cuando fue ella misma la que se las saltó también a mediados de marzo para irse a Jaén a pasar el confinamiento con su novio y otros amigos a una casita compartida en un pueblo jienense.
La sobrina de Felipe VI (quinta en la línea sucesoria al trono de España) no sólo volvió a Madrid cuando todavía no se puede viajar entre provincias sino que "presumió" de ello en las siempre delatoras redes sociales, donde publicó un vídeo en el restaurante oriental Madame Sushita en el que se les puede ver tanto a ella como a su novio, Jorge Bárcenas, en un reencuentro con amigos a los que no pudieron ver en los dos meses y medio que estuvieron fuera de Madrid.
Y claro, en un abrir y cerrar de ojos, los mares de Internet se llenaron de comentarios críticos (de nuevo) contra la sobrina del Rey que no sale de una polémica y ya está en otra poniendo en serios aprietos a Felipe VI, siempre atento a que su familia no se meta en charcos para no perjudicar a la Corona, pero cuyos sobrinos, desde luego, no se lo ponen nada fácil.
Eso sí, en un principio la ira de las redes sociales contra Victoria Federica por viajar entre provincias y saltarse las normas no sería del todo basada en hechos legales, porque el regreso a la residencia habitual se contempla como permitido en el BOE durante el estado de Alarma, siempre que sea justificado.
Tal como recoge Vanitatis, en este caso tanto ella como Bárcenas tendrían que haber llevado la documentación que acreditara que viven la mayor parte del año en Madrid y que el confinamiento les sorprendió estando en Jaén, dato que no está del todo claro.