Sauna criogénica: apúntate al frío extremo para mejorar tu salud y tu belleza

Desde que se hizo público que Cristiano Ronaldo la utiliza para ponerse a punto, las saunas criogénicas han ganado muchos adeptos, y es que los baños de nitrógeno a 180 grados bajo cero permiten, según dicen sus promotores, una recuperación rápida del cuerpo que, ante la bajada de temperatura, comienza a generar endorfinas.

Basta una sesión de tres minutos para poner a punto el tono muscular, aliviar los dolores y disfrutar de una potente sensación de energía.Los beneficios de exponer el cuerpo a temperaturas de hasta 180 grados bajo cero durante unos pocos minutos también se extienden al campo de la salud y ahora están al alcance de todos en algunos centros de belleza y estética.

Hace más de tres décadas que los médicos se ayudan del frío como alternativa al calor para beneficiarse de sus propiedades vasoconstrictoras, analgésicas, anestésicas y antiinflamatorias y tratar enfermedades como la artritis reumatoide, diversos tipos de dermatitis, patologías cardiovasculares, hepáticas y pulmonares o desajustes hormonales.

Pero en los últimos años también se ha pasado a utilizar a nivel estético para adelgazar, llegando a quemar más de 200 calorías en una sola sesión; o para tratar la celulitis, rejuvenecer la piel o prevenir el envejecimiento.

En el ámbito deportivo, la criosauna sirve para curar lesiones, mejorar el rendimiento, aumentar la masa muscular e, incluso, la autoestima. Por lo que es conocido que se utiliza por muchos deportistas de élite en sus entrenamientos habituales.

Las sesiones no se prolongan más de tres minutos y consisten en la liberación de una mezcla de nitrógeno helado y otros gases vaporizados que hacen que se active la circulación y se produzca una vasodilatación que repercute en múltiples beneficios para nuestro cuerpo.