Por fin una mascarilla transparente y segura para mostrarte como eres
No era fácil trasmitir nuestros sentimientos con la mascarilla puesta... hasta ahora
Las mascarillas han llegado a nuestras vidas para quedarse, por ,o menos hasta que la pesadilla de la Covid19 desaparezca o se encuentre una vacuna efectiva contra ella.
Aunque la seguridad pasa por encima de todo lo demás, lo cierto es que las mascarillas que teníamos disponibles hasta ahora son incómodas y además nos impiden transmitir y ver en los demás el estado de ánimo.
Gran parte de nuestra comunicación se basa en los gestos y expresiones faciales que quedan ocultas por un trozo de tela opaco, lo que nos lleva muchas veces a prescindir de ellas para poder mostrar una sonrisa o simplemente para que los demás puedan reconocernos. Especialmente en el caso de los bebés o de niños muy pequeños, las mascarillas actúan como una barrera que les impide asociar un rostro con el de sus abuelos y demás familiares con los que no conviven a diario. De ahí que la firma Redcliffe Medical Devices haya creado estas mascarillas transparentes y muy seguras que además de protegernos de una manera eficaz, incorporan una serie de ventajas que las convierten en un elemento a tener muy en cuenta.
La mascarilla LEAF, lleva en su interior un revestimiento antivaho que permite que se limpie automáticamente y no se empañe. También incorpora un revestimiento exterior permanente antimicrobiano e hidrófobo preparado para destruir prácticamente el 100% de una gran variedad de microbios. Para mantener limpio el aire que respiramos incorpora también un filtro de carbón, situado en la barbilla para mantener libre la cara de obstáculos.
Por si esto fuera poco, gracias a su diseño y a los materiales empleados en su fabricación, la mascarilla nos permite utilizar el teléfono móvil sin quitárnosla incluso en los casos en que estos dispositivos utilicen la función de reconocimiento facial para activarse.
La mascarilla LEAF, lleva en su interior un revestimiento antivaho que permite que se limpie automáticamente y no se empañe. También incorpora un revestimiento exterior permanente antimicrobiano e hidrófobo preparado para destruir prácticamente el 100% de una gran variedad de microbios. Para mantener limpio el aire que respiramos incorpora también un filtro de carbón, situado en la barbilla para mantener libre la cara de obstáculos.
Por si esto fuera poco, gracias a su diseño y a los materiales empleados en su fabricación, la mascarilla nos permite utilizar el teléfono móvil sin quitárnosla incluso en los casos en que estos dispositivos utilicen la función de reconocimiento facial para activarse.
Las mascarilla LEAF se presenta en varios modelos – dos de ellos, LEAF UV y LEAF Pro, están equipados con una luz UV-C integrada en la carcasa del filtro que destruye los patógenos a nivel de ADN– y en diferentes tamaños, de manera que pueden usarse a partir de los tres años en adelante