Apúntate a la hierba de trigo: adelgaza, combate las varices y quita mal aliento
El poder de esta planta reside en la clorofila y el magnesio cuya combinación es similar a la hemoglobina que produce nuestro cuerpo para transportar el oxígeno
La hierba de trigo es la planta con forma de pasto que crece de la semilla de trigo común y que suma adeptos día a día por las propiedades naturales que contiene. El "whear grass", como se conoce en el ambiente médico y nutricional, forma parte de una tendencia conocida como "cocina viva" que apuesta por ingerir sin alterar este tipo de suplementos para conservar al máximo sus enzimas y nutrientes.
Lo ideal para incluir en tu dieta la hierba de trigo es hacerlo en un zumo repleto de vitaminas y minerales que oxigenen la sangre y ayude a tu sistema inmunológico. Para elaborarlo, tienes que cultivar el "pasto" en casa durante 15 días y cortarlo justo en el momento que lo vayas a consumir. En una licuadora, puedes acompañar los brotes con varias piezas de naranja y manzana para reducir su sabor amargo y hacerlo más apetecible.
Doce beneficios que notarás en tu cuerpo si tomas hierba de trigo
El poder de esta planta reside en la clorofila y el magnesio cuya combinación, en un 70% por ciento, es similar a la hemoglobina que produce nuestro cuerpo para transportar el oxígeno desde los pulmones a los tejidos. Consumiendo un vaso de este zumo en ayunas conseguiremos que en 20 minutos nuestro cuerpo mejore la circulación sanguínea, la presión arterial, combata el colesterol y prevenga las varices.
Además, también es rica en saponina, una sustancia depurativa que ayuda a eliminar las toxinas del organismo como los metales pesados, pero que también se utiliza para perder peso, combatir la anemia, regular los niveles de azúcar en sangre, tratar las caries, la congestión nasal, los malos olores corporales, el mal aliento y limpiar el colon.
Si incluyes este zumo verde en tu desayuno "antioxidante" en apenas dos semanas notarás los resultados pero ten en cuenta que su poder es tan fuerte que el proceso de desintoxicación te puede provocar dolores de cabeza o náuseas. Para evitar esos indeseables efectos, es mejor que empieces con poca cantidad y evites mezclarlo con las comidas principales. Si eres sensible al gluten o alérgico al trigo tendrás que consultar con tu médico antes de probarlo.