Las trivialidades de "Sálvame" y su troupe aburren a los anunciantes

Mauricio Carlotti dejó ver la semana en la madrileña Universidad Carlos III que el share ya no es un arma tan eficaz como antaño: "Facturamos lo mismo que Mediaset con cinco puntos menos".

Cinco puntos de ventaja, distancia sideral que se supone que debieran ser decenas de millones de euros de diferencia entre ambos grupos. Pero la diferencia es prácticamente de cero euros por una sola razón; las grandes marcas publicitarias apuestan más por la calidad que por la cantidad.

Por eso la televisión blanca de Atresmedia es más valorada que la de Mediaset, acusada de amarilla en diversas ocasiones por las polémicas que encadena. Y eso le hace ser menos premiada que su rival y peor valorada por los españoles, según señalan prácticamente todos los estudios que se han publicado en los últimos años.

Algo tendrá que ver que mientras el plato estrella de Antena 3 son las series españolas, el de Telecinco sean Sálvame y Gran Hermano. O que mientras la actualidad mande en La Sexta, el programa más reconocible de Cuatro sea ¿Quién quiere casarse con mi hijo?

Esta política de Paolo Vasile tiene unas consecuencias, ya que las grandes marcas le pasan factura a la hora de contratarle publicidad. ¿Cambiará de política Mediaset? Por lo pronto y viendo sus próximas apuestas, Supervivientes o un reality sobre monjas, lo dudamos.

Pero nunca es tarde para que el consejero delegado italiano apueste por otro tipo de televisión, cosa que ha intentado en los últimos años con shows blancos como La Voz, Pequeños gigantes o Levántate. Por esta vía apostarán también en 2016 por Got Talent España, donde la cadena ha puesto toda la carne en el asador al contar con estrellas como Jorge Javier Vázquez o Jesús Vázquez para ocupar las sillas del jurado.