Marhuenda, Ussía y Tertsch abroncan a Moncloa por jugársela al Rey Juan Carlos
La presencia del Rey emérito en el funeral por Fidel Castro está provocando mucho debate en la prensa. Sorprende la opinión del siempre contundente Carlos Herrera, esta vez equidistante.
La polémica suscitada por la presencia de Don Juan Carlos en el funeral de Fidel Castro no para de crecer después de que Ciudadanos cuestionara la idoneidad de enviar al Rey emérito tratándose de un dictador con un largo historial de crímenes a sus espaldas.
Tampoco ayuda en absoluto el hecho de que la portavoz de la CUP en el Parlament catalán, Anna Gabriel, se una a la comitiva española en la despedida de Castro. Arnaldo Otegi quería, pero Estados Unidos no le deja sobrevolar su espacio aéreo.
El asunto ocupa este martes la portada de La Razón y diversos artículos de opinión y comentarios en las tertulias. Uno de los más críticos es el que publica Alfonso Ussía:
"No termino de entender que la Casa del Rey y el Gobierno de España manden al Rey Don Juan Carlos en compañía de un secretario de Estado al entierro de quien no va a ser enterrado. El Rey representa todo lo contrario que el difunto tirano. Con un ministro -por ejemplo el de Agenda digital- y el embajador, España estaría protocolariamente representada. Don Juan Carlos no pinta nada en ese guateque mortuorio, se queja.
Y propone enviar, por contra, al secretario de Estado José María Lassalle acompañado de Pedro Almodóvar, "que hacen muy buenas migas". "Estoy seguro de que la idea es de Soraya, porque peor intención no puede imaginarse", se malicia el columnista de La Razón.
El director de su periódico, Francisco Marhuenda, también ha expresado su desacuerdo en Onda Cero, contrariamente a la opinión de Fernando Ónega y del propio Carlos Alsina, partidarios de que el Rey emérito sí esté.
"Es un tema complicado porque si fuera Pinochet (el dictador chileno), ¿qué diríamos?", se preguntaba Marhuenda. "Fidel Castro es uno de los dictadores del siglo XX, muy querido por la izquierda europea, convertido en un icono para las camisetas, un gran farsante y la historia lo ha puesto de manifiesto", continuaba".
"Es la hipocresía internacional (...). Yo lo siento por él, él no tiene más remedio que ir le guste o no le guste".
Y el articulista de ABC Hermann Tertsch decía en Twitter:
En cambio Carlos Herrera, que habitualmente no se muerde la lengua en esta ocasión se ha mantenido equidistante: "Aunque el personaje sea un tirano lamentable, haya que ir. No hay más remedio que ir. Otra cosas es cómo modular la presencia allí, pero sí tiene que estar España", ha afirmado en COPE.