Estibadores montan una bronca en el puerto y agreden a un cámara de Canal Sur
Ha ocurrido en Algeciras. Un grupo de exaltados que no se tomó bien la aprobación del decreto ley en el Congreso la emprendió contra los periodistas, que tuvieron que salir de allí corriendo
Los estibadores prometen seguir adelante con sus protestas.
Los estibadores no se han tomado nada bien la convalidación por parte del Congreso del decreto ley de la estiba, aprobada este jueves gracias a los votos del PP, Ciudadanos y el PNV y a la abstención del PDeCAT, la antigua Convergencia.
En la Cámara Baja un grupo de ellos que se había desplazado a Madrid para seguir la jornada in situ fue desalojado de la tribuna de invitados por la presidenta, Ana Pastor. El motivo fue que durante la intervención del portavoz del PP, Miguel Barrachina, se pusieron a insultarle a voces, aplaudidos y jaleados desde abajo por los diputados de Unidos Podemos.
Pero en el Puerto de Algeciras fue peor, puesto que los estibadores llegaron a las manos con el resultado de un cámara de Canal Sur herido tras recibir un puñetazo y varias patadas de un grupo de ellos.
Ocurrió junto a la sede social que la Coordinadora de Estibadores tiene en el puerto andaluz, el mayor de España por volumen de tráfico. En concreto fuera, en la terraza de un bar que hay al lado.
La Sexta, Telemadrid, Antena 3, Telecinco y Canal Sur estaban tomando imágenes. Una vez producida la votación en el Congreso los estibadores empezaron a corear consignas contra el Gobierno y contra la prensa, a la que acusaban de manipular. Intentaron amedrentar a los periodistas para que se fueran pero no lo consiguieron, según los testimonios recabados por ESdiario.
Poco antes de las dos de la tarde el cámara de Canal Sur Francisco Bueno preparaba un directo para el informativo junto a su redactora. Sin mediar palabra un estibador se le echó encima y le dio un puñetazo. Después llegaron más y le cosieron a patadas mientras le exigían que no grabara.
Bueno pudo salir corriendo, como también los demás periodistas. Entre amenazas, eso sí. El cámara de Telemadrid se libró de ser agredido por los pelos, puesto que varios estibadores frenaron a uno que se dirigía a él como una flecha.
El reportero de la televisión autonómica andaluza se fue a un centro de salud para interponer después una denuncia. Su parte de lesiones certifica que tiene dañado el dorso de la mano izquierda y contusiones en la mandíbula y la cadera izquierda.
"Es triste que los medios suframos esto de unos energúmenos que quieren coartar la libertad de prensa", afirma en declaraciones a este diario. Aunque no obstante aclara que no todos los estibadores eran violentos.
Diversas asociaciones de prensa han condenado lo sucedido, empezando por la Federación de Asociaciones de la Prensa de España (la FAPE). Y lo peor es que seguramente él u otros periodistas tengan que volver al puerto a partir de la semana que viene, puesto que se prevén más paros encubiertos de los estibadores.
Francisco Bueno dice que si le toca él volverá para informar, pero manda un mensaje a sus agresores: "Nosotros somos trabajadores normales".