Telecinco tira de escándalo para "salvar" a Jordi González y Antena 3 lo machaca
Ya lo anticipaba ESdiario, Mediaset premiaba con un "regalo envenenado" al presentador catalán. Ahora se confirman los peores temores y su pésima audiencia ha hecho saltar todas las alarmas.
Se lo contábamos el pasado 2 de julio en ESdiario, Jordi González iba a estrenar un programa de debates para ocupar el prime time de los domingos veraniegos. En este sentido, les explicábamos que la nueva apuesta podría convertirse en una trampa para el presentador catalán porque un espacio similar, El gran debate, era una de las grandes apuestas de la temporada en Telecinco y en verano de 2013 se cancelaba sin previo aviso. El propio Paolo Vasile se veía obligado a hablar de su cancelación y decía que "las presiones (de los políticos) son constantes, pero lo que hacemos televisión estamos hecho de un material especial para resistirlas. El interés de la audiencia es cíclico, pero las finanzas y la política presentan el ciclo más corto".
Pero pese a manifestar el supuesto poco interés de la audiencia con la política, Telecinco recuperaba la política para sus noches de prime time del fin de semana con la emisión de un nuevo formato, Un tiempo nuevo, bajo la presentación de Sandra Barneda. El cambio de opinión de Vasile, que "jubilaba" el debate de su parrilla era ampliamente comentado por los medios. Sin embargo, poco iba a durar el espacio que se cancelaba meses después (octubre 2014-junio 2015), un fracaso que trató de ocultarse pasando el programa a Cuatro hasta que finalmente desapareció del todo en junio de 2015.
Tras meses sin política en el prime time, Mediaset lo intentaba de nuevo en Cuatro con Toma partido. Sin duda el último y más sonado fracaso: Dos semanas es el tiempo exacto que duraba en parrilla el programa. El espacio presentado por Miguel Ángel Oliver no conseguía los datos de audiencia esperados. En su lugar, la cadena retomó la emisión de la serie Gym Tony y posteriormente First Dates.
Los pésimos resultados de este domingo
Todas las miradas estaban así puestas en la segunda entrega de Mad in Spain. El espacio de debate presentado por González tiraba de contertulios nuevos, algunos de ellos polémicos, como Carlos Lozano y Alonso Caparrós o el siempre mediático, Santiago Segura. No iba a servir. Ni siquiera el siempre efectivo escándalo televisivo, con expulsión de plató incluida (a una espectadora en la grada del plató) a gritos de "¡sivergüenza!" por parte del presentador.
Nada servía. Este domingo comenzaron a confirmarse los peores augurios. Así, los datos de audiencia de González y su Mad in Spain son para que salten todas las alarmas en Telecinco y comience a tambalearse el proyecto veraniego de Mediaset: el debate registró un pésimo 10,1% consiguiendo reunir en las televisiones a únicamente 1.047.000 telespectadores. Mal resultado si además tenemos en cuenta que su principal competidora, Antena 3, se imponía con claridad en esa franja con más de 5 puntos de ventaja (un 15,5% de share) y rozando los dos millones de espectadores con una apuesta sencilla y barata, El Peliculón, que este domingo ofrecía el film Más allá del amor.
De esta forma, Telecinco también se veía superado por la película de La 1 de TVE. Un desastre de noche que puede hacer peligrar la gran apuesta veraniega de Mediaset porque su "batacazo" nocturno facilitaba también el rotundo liderazgo del día para la primera cadena de Atresmedia: Antena 3 registraba un 11,2% de share por el mal dato del 9,7 de Telecinco, sólo 6 décimas más que su segunda cadena, Cuatro.