El batacazo histórico de una gran estrella de Telecinco hace temer por su cabeza
En el estreno del primer programa ya los datos fueron muy pobres. La segunda entrega se puede catalogar como catastrófica y el formato podría peligrar. A Vasile,de inicio, no le gustó
Jesús Vázquez, en el estreno de su programa. FOTO: Telecinco.
Me lo dices o me lo cantas, una de las grandes apuestas veraniegas de Telecinco está haciendo aguas. Tanto es así que ahora nadie cuenta con su continuidad en la primera cadena de Mediaset. Ni siquiera la apuesta por su presentador, un valor casi siempre seguro como es Jesús Vázquez, ha salvado esta oferta estival de la cadena de Fuencarral. Tras dos entregas se pude decir que el programa puede tener las horas contadas.
Y es que su ya no superaba las expectativas en su estreno -con una fría acogida por parte de los telespectadores (un 12% de share aproximadamente) y no muy buenas críticas televisivas-, este pasado martes 1 de agosto su segunda entrega vino a confirmar el desastre: Me lo dices o me lo cantas el espacio ha registrado un fuerte descenso en una semana, perdiendo 3,2 puntos. De esta forma, baja del 10% de cuota de pantalla y se tiene que conformar con un 9,7% de share y un total de 1.181.000 telespectadores. Cifras de crisis total.
El programa musical se veía así superado por la película de Antena 3, que no era precisamente de estreno sino que acumula varios pases, Red 2, que fue líder en la franja del rime time con más de 1,2 millones de espectadores (1.215.000) y el 10,8% de cuota. Cifras bajas sí, en unas jornadas que efectivamente son de poco consumo televisivo.
El fracaso de confirma los peores temores de Paolo Vasile. En este sentido diversos medios habían informado de que Vasile decidió supervisar la primera entrega del programa, una vez que Fremantle completó las grabaciones y el montaje de los cuatro primeros programas, y llevó a la cadena el primero. El consejero delegado de Mediaset visionó el trabajo y al final, concluyó tajante: "Lo deberías grabar entero otra vez".
Directivos de la cadena y responsables de la productora se echaron las manos a la cabeza. No había tiempo ni dinero para algo así. Habría que salir al paso con una solución intermedia. Esto retrasó el estreno del programa hasta este verano, cuando inicialmente estaba previsto que viese la luz en mayo o junio. Vasile no andaba mal encaminado, el formato de entretenimiento no convence a la audiencia. ¿Habrá cancelación?
A este fiasco se une al mal estreno de otra de las grandes apuestas del verano, el Mad in Spain, el espacio de debate que presenta Jordi González la noche de los domingos.