Otro terremoto interno en Mediaset: Telecinco airea el secreto de los sueldos
Era tema tabú, suscrito a cláusula de confidencialidad, sin embargo ello no ha impedido que por primera vez salgan a la luz los salarios de participantes en realities como 'Gran Hermano'.
Se lo estamos contando en ESdiario, este mes de agosto no está siendo nada tranquilo para Telecinco y Mediaset. Al hecho incontestable de que sus apuestas de verano no están funcionando (Mad in Spain, Me lo dices o me lo cantas o The Wall) se ha unido el hecho de una disputa interna provocada por el fichaje de una colaboradora, Soy una pringada, por sus comentarios ofensivos contra buques insignias de la casa, como la serie Aquí no hay quien viva o presentadoras como Mercedes Milá o Carlota Corredera, que ha terminado por hacer estallar a algunos de los aludidos contra la propia Mediaset.
Ahora, por si fuera poco, en un programa de la casa, el Mad in Spain que ya en diferido presenta Jordi González los domingos en Telecinco, en esa carrera desesperada por atraer a la audiencia el programa airea algo hasta ahora jamás contado: los sueldos de los participantes en los realities estrella de la casa, Gran Hermano, Supervivientes, Quién quiere casarse con mi hijo... todo revelado en la sorprendente noche del domingo.
Así, la mayoría de los participantes de los realities ganan el salario mínimo interprofesional, es decir, 707 eurosal mes. La productora de Gran Hermano no suele pagar más de 500 euros semanales a sus concursantes, cantidad que se percibe mientras dura su estancia en la casa", afirmaba el espacio de Telecinco citando a una información del diario El País.
"En otros programas como Quién quiere casarse con mi hijo o Adán y Eva, los candidatos cobran en torno a 70 y 90 euros al día de grabación", continuaron explicando en el programa de González siempre citando las mismas fuentes y aclarando que por este motivo todos los participantes quieren alargar su estancia a cualquier precio.
Puede ver un momento del programa pinchando aquí.
En este punto, en Mad in Spain sacaban a la luz otra realidad: "Lo más rentable es ser de los primeros expulsados y descubrir el verdadero negocio que se esconde detrás, el bolo. Todos los concursantes de Gran Hermano que lo deseen cuentan con un contrato de representación una vez están fuera de la casa y que les hará ganar miles de euros en poco tiempo", destacaban. "Un concursante con cierto tirón puede ganar entre 1300 y 2500 por tres horas de trabajo", revelaban.
Era el momento en el que tomaba la palabra Jordi González para de una manera sorprendente desdecir lo afirmado en su propio programa:"Nadie sabe lo que gana o deja de ganar un concursante que ha firmado un contrato con una productora para participar en Gran Hermano. El contrato incluye unacláusula de confidencialidad. Nadie sabe nada, se puede especular muchísimo, pero, lo publique quién lo publique, eso es absolutamente falso".