Mercedes Milá le mete el palo más humillante a "Gran Hermano" en el peor momento
Dicen que la venganza es un plato que se sirve frío y la veterana presentadora se lo ha tomado muy en serio a la hora de ponerlo en práctica. Lo único que le faltaba a Telecinco era esto.
Dicen que la venganza es un plato que se sirve bien frío y parece que Mercedes Milá lo ha confirmado en sus propias carnes.
Tras su controvertida salida de Gran Hermano, la veterana presentadora ha dejado caer todo tipo de puyas contra la dirección de Mediaset y este domingo puso la puntilla a su adorado concurso.
Y es que, será casualidad o no, pero desde que Milá dejó GH, el reality no levanta cabeza. Ya en la edición anterior, la primera que presentó Jorge Javier Vázquez, el formato cayó en los audímetros disparando las alarmas.
Ahora, con GH Revolution, Telecinco estaba dispuesta a demostrar que lo de la edición anterior solo fue un lapsus, pero nada más lejos de la realidad. Los comienzos no han podido ser más discretos y la cosa no mejora. Tanto es así que mientras las redes claman por el regreso de Mercedes, Milá le puso la puntilla al Debate que presenta Jordi González.
Lo hizo desde Cuatro donde se dejó caer como invitada del programa de Jesús Calleja, Volando Voy, que registró un 8.1% de cuota y reunió a 1.488.000 espectadores, más de 400.000 más de los que logró seducir el Debate de Gran Hermano en Telecinco a la misma hora (1.040.000 y un 8.2%). Es lo único que le faltaba al veterano reality de Mediaset, que volvió a caer y no levanta cabeza.