"A Rufián le pegaban en el cole y así su conducta", Pérez-Reverte la lía en tele

El periodista y escritor Arturo Pérez-Reverte fue uno de los invitados estrellas de este sábado en La Sexta Noche al conceder una entrevista a Iñaki López en segunda cadena de Atresmedia.

En La Sexta, Pérez-Reverte muy fiel a su estilo no tuvo pelos en la lengua y analizaba a su manera la idiosincracia de los españoles. En este sentido, no dudaba en decir que los españoles tenemos "una cierta tendencia al suicidio nacional, cultural y político por el desconocimiento de la historia", comenzó asegurando, antes de relatar que esto sucede "cuando no tienes el conocimiento y las referencias de tu propia historia" y sentenciar que "el español no tiene memoria más que para el agravio".

En este sentido explicaba en La Sexta que "hay un problema fundamental en España, que no se ofrece a los jóvenes un discurso motivador. Ese hueco ha sido llenado por otros, y en Cataluña sí se les ha dado, manipulados o no, reales o no, y les han hecho creer y tener fe", apunta, declarándose "pesimista en ese sentido" ya que "esa guerra está perdida".

Nos merecemos a Gabriel Rufián. Tengo la teoría de que le pegaban en el colegio y de ahí algunas conductas posteriores. Cada uno se busca la vida como puede

Y era el momento que aprovechaba para arremeter contra el diputado de ERC, Gabriel Rufián, con quien ha protagonizado varias y agrias polémicas en Twitter, pero esta vez se lo decía por televisión: "Nos merecemos a Gabriel Rufián. Tengo la teoría de que le pegaban en el colegio y de ahí salen algunas conductas posteriores. Cada uno se busca la vida como puede".

Y, por supuesto, tuvo palabras para Carles Puigdemont y el resto de exconseller fugados en Bélgica: "cuando ahora oigo hablar a un político diciendo que es un exiliado o un preso político me da risa. España es un estado fallido, no hemos sido ni un país descentralizado ni un Gobierno centralista, organizado y fuerte. Nos ha faltado una guillotina, simbólicamente o a veces no tan simbólicamente".

Iñaki López le dirigía una pregunta relacionada con su carácter y algunos de sus enganchones públicos a lo que el escritor confesaba que "ya no me enfado como antes, ahora me enfada más la estupidez, la bobada, el inculto que se atreve a sentar cátedra sobre su ignorancia".

Y lógicamente especial atención hubo para las redes sociales, en las que Arturo Pérez-Reverte triunfa, para bien y para mal: "Twitter es un territorio divertido. Yo planteo debates, luego me retiro y veo cómo el debate continúa. Te da un pulso muy acertado de lo que es el ciclo humano, es un buen escaparate si uno sabe entrar y salir, pero vivir inmerso en Twitter es muy desagradable".