Jaime Peñafiel revela un grave delito del Rey Juan Carlos y provoca una tormenta
El veterano periodista no ha tenido pelos en la lengua y con su afilada pluma ha contado un secreto del Monarca emérito: un gravísimo accidente que él provocó cuando solo tenía 17 años.
Lo cuenta casi de soslayo, al final de su columna en la colaboración semanal en LOC, el veterano periodista experto en Casas Reales, Jaime Peñafiel. Abordando algunas cuestiones de la actualidad de la Casa Real española y anécdotas, el periodista ha informado de un oscuro y turbio suceso que afectó en el pasado al Rey emérito Juan Carlos I, un atropello con herido y sin carné. Lo hace en apenas dos líneas y avisa además que "esa es otra historia que ya contaremos"... Algo que no ha pasado desapercibido en la Casa Real, según ha podido saber ESdiario.
Pero vamos por partes y por orden. Peñafiel habla de coches y cuenta que "el pasado mes de julio, la Delegación de Hacienda de Madrid sacaba a subasta, por segunda vez, los dos Ferrari que el jeque de los Emiratos árabes había regalado, a finales de 2011, a Don Juan Carlos. El Gobierno quería liquidar, por la vía rápida, estos coches de la discordia. No era razonable que el soberano español aceptara un presente tan valioso de otro Estado para ser, luego, subastado. Era un menosprecio. Hubiera sido más correcto decir que, por cuestiones legales o morales, no se podían aceptar. Pero era una época en la que los regalos al Rey y a la Reina estaban a la orden del día, una práctica que Felipe ha desterrado".
Y prosigue "muy diferente, en todos los aspectos, es el caso del mini Morris 1275-CT berlin, dos puertas que, el entonces Príncipe Juan Carlos compró en 1969 con su dinero ahorrado y que luego vendió, con sólo 15.000 kilómetros a su primo Gonzalo de Borbón (que nunca se lo pagó). El coche acabó en manos de don Pedro Molina, un taxista jubilado que ha intentado venderlo. Una personalidad pretendió comprarlo para regalárselo a Don Juan Carlos. Pero el buenazo del señor Molina, consciente del valor histórico, se subió a la parra pidiendo mucho dinero".
Y continua el cronista explicando que "wl miércoles de esta mi semana se cerró la subasta de otro coche histórico, perteneciente, también, a la Casa Real. Concretamente al Rey Juan Carlos y posteriormente a su hijo Felipe entre los años 1986-88. Se trata de un precioso Volvo 460 de color rojo, utilizado además por Doña Sofía. Precisamente conduciéndolo por Palma fue multada por exceso de velocidad. La multa llegó al Palacio de La Zarzuela, que es el domicilio que figura en su carnet de identidad, en el de conducir y en el Volvo. La cuantía, 12.000 pesetas de las de entonces. Pero la multa se pagó. A propósito de esta sanción, Tráfico recordó que la Reina no es aficionada a la velocidad. Es más, no comparte ni con su marido ni con su hijo esa pasión por los coches y las motos.
El Volvo -prosigue- que se subasta lo adquirió el pasado mes de abril un banquero al leer en internet un anuncio que decía: "Vendo coche perteneciente al Rey Juan Carlos", quien aparecía saliendo del Volvo con Doña Sofía. Y yo sin saberlo, cuando la noticia la tenía en mi propia casa. Porque, ¡oh, casualidad! el banquero es... vecino y amigo mío. Y, para más INRI, el coche se encuentra aparcado y cubierto por una lona en el garaje de la casa junto al de Carmen, mi mujer. Sin duda alguna, este vehículo tiene un valor histórico añadido: fue el primer coche que Felipe tuvo cuando sólo tenía 18 años".
Y termina con la bomba con la que nosotros iniciamos este artículo: "Y 17 su padre el día que atropelló a un ciclista en Olmedo conduciendo un Mercedes... sin carné. Pero esa es otra historia que ya contaremos". Sin duda en la Familia Real ya ha caído con una bomba esta escandalosa información que han "leído con enorme sorpresa e indignación".