Ussía propone la solución definitiva para salvar a Anna Gabriel de la indigencia
El periodista está muy preocupado por la alarmante situación que atraviesa la exportavoz de la CUP en su retiro suizo de lujo y ha decidido tomar cartas en el asunto pero de manera urgente.
Mucho se está hablando del carísimo alquiler de la exportavoz de la CUP en Ginebra a pesar de que a ella no le hace demasiada gracia y este miércoles Alfonso Ussía no ha dudado en recoger el guante desde su columna de La Razón con mucha retranca: "Llevo días muy preocupado con la situación económica, insostenible, de la excelsa dirigente de la izquierda separatista y marginal de Cataluña Anna Gabriel".
No es para menos, ironiza, porque "ha alquilado un modesto apartamento en Ginebra cuyo coste de alquiler, también adecuado a su modestia y humildad, es de 5000 euros al mes. Hasta el momento, ha satisfecho todos los meses la cantidad acordada, y puntualmente. Pero le falta un trabajo para que las autoridades helvéticas le concedan el permiso de residencia. Aun así, insiste en permanecer en ese modesto apartamento de 5000 euros al mes, que menoscaba cruelmente su bolsillo".
Dado el problema de liquidez, Ussía propone una burlona solución: "Que la CUP proceda a fabricar huchas de Anna Gabriel como las del Domund de mi infancia, en dos versiones. Versión pelo "Prusás", y versión pelo "Genéve". Todo menos dejar sin recursos a una perseguida por el franquismo que vive en Ginebra en un apartamento de 5000 euros de alquiler. Lo más parecido a una celda".
Eso sí, señala, "habría que elegir bien la jornada de cuestación. Y que los portadores de las huchas de marras fueran personajes populares y queridos por la ciudadanía. Propongo a Ada Colau, Pisarello, Fachín, la monja Coñazo, Pilar Rahola, Rufián, Piqué, los presentadores de TV3, Jordi Évole, Karmele Marchante y más representantes de la cultura y la política catalanas. De tal modo, que al finalizar la cuestación, y siempre que no sea un miembro de la familia Pujol el encargado de abrir las huchas y contar el dinero recaudado, se obtenga con toda seguridad una cantidad de euros considerable, que ayudaría a sobrevivir sin contratiempos a la alquilada por 5000 euros cada mes".
Y es que, bromea, "la situación es tremenda. El franquismo persigue a la gran revolucionaria de la izquierda separatista. Ella huye a Suiza, que está más cerca que Cuba, faltaría más. Alquila un cuchitril por 5000 euros, que es una minucia. Pero vivir no es dormir. Hay que comer, ir al cine, alquilar una barca para remar en el lago, tomar un aperitivo en un chiringuito ribereño, comprar hamburguesas, adquirir en versión suiza el libro La Catalogne, mon pays, y lo que sea, que también hay que darle trecho al antojo. Personalmente, me comprometo a colaborar. Pero ya. Que lo está pasando fatal".