La elección de Fernando Garea como presidente de EFE provoca un tsunami en redes

El veterano y televisivo periodista parlamentario Fernando Garea ha sido propuesto por el Gobierno de Pedro Sánchez como nuevo presidente de la Agencia Efe en sustitución de José Antonio Vera, que venía desempeñando este cargo desde 2012, según ha confirmado el propio periodista, actual adjunto al director de El Confidencial.

Garea explicó que ha aceptado "muy ilusionado" la oferta del Ejecutivo de tomar las riendas de la agencia pública, consciente de la dificultad que supone dirigir uno de los grandes referentes informativos a nivel nacional e internacional.

"Asumo este reto difícil ilusionado, porque la Agencia Efe es uno de los referentes informativos en cuanto a rigor y calidad", destacó el periodista de El Confidencial, medio que adelantó la noticia de su propuesta de nombramiento.

Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, Fernando Garea (Madrid, 1962) inició su carrera profesional en Diario 16 y después fue fundador de los diarios El Mundo y Público.

Garea ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional como cronista parlamentario. Fue responsable de esta información en El País desde abril de 2008 hasta 2017; el 13 de septiembre de ese año, anunció en su cuenta de Twitter que abandonaba su puesto en este medio para poder "seguir escribiendo sobre política y Parlamento".

Muy conocido entre el gran público por sus apariciones televisivas ha sido tertuliano en debates políticos de todo tipo de programas de TVE, 24Horas, Antena 3, Telecinco, La Sexta, Cuatro o CNN+. En radio también ha participado en programas como A vivir que son dos días de la Cadena SER.

Como suele ser habitual, la noticia de la elección de Garea como nuevo presidente de Efe provocó un tsunami de reacciones en redes sociales, convirtiéndose rápidamente en uno de los temas más comentados de la tarde.

En un abrir y cerrar de ojos Twitter fue un aluvión de comentarios a favor y también en contra del nombramiento del periodista por parte del Gobierno de Sánchez, entre los que defendían su trayectoria y los le consideraban un periodista afín al PSOE.