Fernando Ónega pega un hachazo a Soraya por mala perdedora que la deja temblando
Sáenz de Santamaría ha quedado retratada en su intento de hacerle media Ejecutiva a Casado pese a haber sido derrotada. El periodista le recuerda que el poder no se reparte, "se conquista".
Sáenz de Santamaría, Ayllón y Báñez.
Las exigencias de Soraya Sáenz de Santamaría a Pablo Casado, e incluso su ruptura de las negociaciones para integrar a los perdedores, reciben este jueves críticas críticas de prácticamente todos los columnistas.
De entre ellas destaca la del siempre prudente Fernando Ónega, que en su monólogo en Onda Cero ha cargado contra Sáenz de Santamaría con dureza por esas "ínfulas", como las llama el equipo de Casado.
"La integración es muy fácil de invocar, queda muy bien en los discursos, pero es muy difícil de alcanzar. La integración es reparto de puestos, reparto de poder y en política el poder no se reparte, se conquista", le ha recordado el periodista.
"La razón está de parte de Pablo Casado. Si se elige un presidente del partido es para que pueda gobernarlo. Y gobernarlo empieza por hacer equipo y también para premiar a los leales. Solo así puede desarrollar un programa coherente y evitar las conspiraciones internas", ha añadido.
"Quien ha perdido la votación tiene derecho limitado a dirigir", le ha dicho. "Puede exigir presencia y debe dársela, pero no por cuota y menos en porcentaje tan elevado. Sería integración pero también crear dos bandos, por lo menos dos tendencias. Sería crear un partido dentro del otro. Sería llevar la tensión a los órganos directivos".