Pablo Iglesias señala a Herrera, Ferreras y Ana Rosa como los dueños del "poder"

El líder de Podemos sigue obsesionado con los medios de comunicación privados, ésos de los que un día llegó a decir que podían atentar contra la libertad de expresión para justificar lo que a su juicio era imprescindible: intervenirlos.

Y para que no queden dudas al respecto, Pablo Iglesias incluso ha señalado a algunos de los periodistas más conocidos del país en un debate en el programa en la cadena iraní Hispan TV que él mismo presenta aún, Fort Apache, dedicado a las fake news.

De Herrera a Ana Rosa

Los agraciados son Carlos Herrera, el periodista de COPE con más prestigio de España; Antonio García Ferreras, director de Al Rojo Vivo y referencia informativa de todo el grupo Atresmedia; y Ana Rosa Quintana, presentadora en Telecinco del espacio que lleva su nombre.

"Un político nunca debería preguntar esto -dijo Iglesias en su mesa de tertulia-, pero como en este caso llevo el sombrero de presentador... Todo el mundo sabe que Ana Rosa, Herrera, Ferreras... cualquiera de estos directores de grandes programas tienen muchísimo más poder que cualquier ministro, muchísimo más. Y esto es así", detalló.

Para llegar a su sentencia, que en un tono amistoso escondía sin embargo su ya conocida postura contra la libertad de prensa si procede de medios ajenos al ámbito público. "Y es verdad que hay competición, digamos que como los grandes generadores de opinión a través de programas de televisión o radio, y que a veces se odian (...) pero en general es una competición entre agentes privados", peroró insistiendo en su manía persecutoria contra los medios de comunicación pertenecientes a empresas.

Y para que no quedaran dudas de que sigue pensando igual, resumió su posición en una pregunta al resto: "¿Hasta qué punto esto es normal y lo más deseable en una sociedad democrática?". El secretario general de Podemos dejó en el aire, así, una reflexión que ya le hizo célebre hace años, cuando sostuvo la necesidad de que desaparecieran los medios de comunicación privados. "Que existan medios privados ataca a la libertad de expresión", enfatizó hace tres años. Al parecer, sigue pensando lo mismo.