Ada Colau hace trizas a la concejal socialista en "cinco palabras" demoledoras
Ya no se trata de desenmascarar a la flamante nueva alcaldesa de Barcelona que le ha dado la vuelta al colchón, ella se quita la careta sola, ahora se trata ya de ir un poco más lejos.
Este martes arremete duramente Jesús Lillo contra Emmanuel Macron y Manuel Valls en su columna de ABC y se pregunta si serán capaces de analizar la "idoneidad moral y política de una alcaldesa que desde que prometió su cargo el pasado sábado ha incumplido de manera integral el juramento que pronunció. Ni es leal al Rey, ni respeta la Constitución ni está al servicio, como también dijo el sábado, de cada uno de los ciudadanos. Lo único que lleva a rajatabla es lo del imperativo legal que le permite cobrar a fin de mes".
Lillo no tiene piedad con una Ada Colau que se se define "ni independentista ni antiindependentista" pero "le queda fenomenal el lazo amarillo que identifica a los golpistas" y que volvió a colocar en el balcón del Ayuntamiento de Barcelona nada más volver a convertirse en alcaldesa.
Según el periodista, "unos cambian el colchón como gesto inaugural y otros le dan la vuelta al que tenían". A su juicio, "Colau representa la permanencia de los muelles en los que se rebulle. Manuel Valls y el PSC le ventilan la alcoba".
Ya no se trata a estas alturas, reflexiona, de "desenmascarar a Ada Colau, activista que se basta y se sobra para quitarse la careta y mostrar en público sus muecas, sino de identificarla y denunciarla".
Por eso, concluye, "Ciudadanos ya ha roto con Manuel Valls por apoyar a quien se alinea con los golpistas" pero aunque "al PSC no le termina de gustar lo del lazo amarillo en el balcón" prefiere mirar hacia otro lado.
Concretamente hacia adelante. "Ya está, no pasa nada", asegura la socialista Laia Bonet en los pasillos del Ayuntamiento de la Ciudad Condal.
Y para Lillo, "esas cinco palabras son el mejor resumen de lo que el PSOE entiende por normalizar y avanzar, en Barcelona o en Madrid".