El ocurrente lema que secundó Begoña Gómez le explota a su marido en la cara
La mujer del "presidente" Sánchez a la que le "estamos pagando con nuestros impuestos la vuelta al mundo" es la muestra más sangrante de lo que está pasando ahora a todos los españoles.
En plena ola de calor y con el país paralizado ante la pasividad de Pedro Sánchez con los pactos para gobernar o no la indignación en torno al presidente del Gobierno empieza a sobrepasar todos los límites.
En este sentido Luis Ventoso se ha sumado al enfado generalizado y aprovecha su columna de ABC para recordar algunas cosas que parece que muchos olvidan. Por ejemplo, "como vivimos en un país de firme vocación amnésica, se suele olvidar que en 2014, en las primarias del PSOE, Sánchez era el candidato liberal frente al izquierdista Madina. Ganó Sánchez, el teórico moderado. Sin embargo, en cuanto se plantó en Ferraz se encomendó al lema "somos la izquierda", e incluso regaló el mando de importantes plazas a los ignaros populistas de Podemos".
Será, ironiza Ventoso, porque "si hubiese que resumir los principios rectores del sanchismo, cabrían en nueve palabras: todo da igual con tal de conservar el poder. Y ahí debemos reconocerle una marrullera maestría", admite.
Así, recuerda también que "en la noche de la pírrica victoria del PSOE su afición coreó frente a Ferraz aquello de ¡con Rivera, no!". No se le olvida tampoco que "la mujer del presidente –a la que le estamos pagando con nuestros impuestos la vuelta al mundo, en clamoroso contraste con la sabia discreción de la del austero Mariano– se asomó al balcón de la sede del partido y secundó entusiasmada y con mucha risa tan ocurrente lema. Un mes más tarde, su marido demanda el apoyo de Rivera. Lo apremia a que tenga "sentido de Estado" y lo haga presidente a cambio de nada", se hace cruces el periodista.
Y es que aunque "Sánchez se quedó a 53 escaños de la mayoría absoluta" vendió un "triunfo extraordinario, sobredimensionado por las teles palmeras" "acorde a una vanidad hipertrofiada".
El problema, recalca, "es que a pesar de los desparrames de egolatría siguen haciéndole falta 53 escaños más".
Y es aquí donde "llega la llamada Paradoja del Doctor Sánchez. Con principios de goma y rostro de cemento, demanda el apoyo de PP y Ciudadanos, dos partidos liberales y que tienen como divisa la unidad de España, pero también desea que le respalden los comunistas antipatriotas de Podemos. Si la cosa se pone chunga, a una mala le sirven incluso los votos de los partidos de Junqueras y Puigdemont y los de los proetarras".
Para terminar ironiza con que "conocida la facilidad para las tesis doctorales, no resulta descartable que ya estemos trabajando en una en Matemáticas: "Manual de resistencia 2: El círculo cuadrado".