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Nacho Abad descubre en exclusiva quién era la famosa presentadora acosada

A finales de agosto trascendió que una conocida periodista ex de Mediaset estaba sufriendo un grave caso de acoso por parte de un hombre. Ahora "Espejo Público" ha dado su identidad.

Nacho Abad.

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Trascendió a finales de agosto que la Policía Nacional había detenido a un hombre por acosar durante dos años a una famosa periodista, muy conocida por el gran público, pero de la que no se dio el nombre.

Trascendió entonces que el acosador le envió cartas y mensajes a través de Twitter y que hasta llegó a dejar a la presentadora objetos en el balcón de su casa.

Y este lunes coincidiendo con el comienzo de temporada de Espejo Público en Antena 3, ya con Susanna Griso a los mandos, Nacho Abad sacó a la luz la identidad de la víctima: se trata de Marta Fernández, ex de Telecinco, de Cuatro y de CNN+.

Citando fuentes policiales, Abad explicó que los hechos se remontan a 2017 cuando el autor comenzó a dirigirse de forma continua e insistente a Marta mediante el envío de misivas y mensajes para mantener un contacto con ella.

Pero la cosa empeoró en 2018 cuando el acosador dejó objetos en el balcón de la vivienda de Fernández, como unas llaves, al tiempo que seguía publicando comentarios en Twitter en los que describía con detalle la ropa que llevaba la expresentadora de Las Mañanas de Cuatro en cada momento o los lugares en los que había estado.

La situación se volvió insostenible cuando permanecía en las inmediaciones de la casa de Fernández o se presentaba en algún acto público en el que participara hasta el punto de tener que recurrir a los servicios de seguridad para abandonar esos lugares.

Así las cosas, la periodista decidió denunciar el caso en la Comisaría de Centro de Madrid el pasado 3 de agosto y los agentes descubrieron que es un hombre de 44 años, con domicilio en Madrid, y con antecedentes por robo con violencia y lesiones.

Pocos días después fue detenido por el Equipo de Delitos contra las Personas de la Comisaría y la autoridad judicial decretó una orden de alejamiento contra el detenido, que no podrá aproximarse a la víctima a menos de 500 metros ni comunicarse con ella en ningún caso.