Pedro Sánchez no se baja del burro y exige gobernar con la abstención de PP y Cs
El líder del PSOE se olvida del "diálogo y el parlamentarismo" al que apeló en su moción de censura y reclama a sus dos grandes rivales una abstención para que él gobierne solo.
Es el autor del "No es no". El político que ha obligado, por dos veces, a repetir las Elecciones Generales en España, en 2016 y en 2019. Y el que se ha negado a llegar a ningún acuerdo ni con Podemos ni con Ciudadanos. Pero, pese a esos antecedentes, sigue en las mismas: no tiene intención de llegar a pactos con nadie y reclama, sin ambages, que sus mayores rivales le firmen un cheque en blanco.
Por si había dudas, Pedro Sánchez lo ha vuelto a repetir e una entrevista en RNE en la que ha olvidado cómo justificó, entre otros argumentos, la moción de censura cuando solo tenía 81 diputados: insistió en que con él volvería el "parlamentarismo" y en la necesidad de diálogo, dos razones que ahora ha olvidado.
En la entrevista, para librarse de Pablo Iglesias, ha recalcado primero las dificultades de conformar un Gobierno estable con Unidas Podemos, ya que ninguna encuesta da a esta suma la mayoría absoluta y, por tanto, una alianza así tendría que apoyarse necesariamente en los partidos independentistas.
Sánchez ha recordado cómo la rama de Podemos en Cataluña, los Comunes, exige para desbloquear la situación "la liberación de los políticos presos catalanes", lo que el presidente tilda de "condición desafortunada" que demuestra "la seria discrepancia" del PSOE con los morados en relación a cómo resolver la crisis en Cataluña.
Por eso ha insistido, pese a las reiteradas negativas de Pablo Casado y de Albert Rivera, en que PP y Cs deben facilitar su investidura para, además, permitir un Gobierno " de izquierdas". Todo ello mientras mantiene pactos con el soberanismo en 40 municipios y la Diputación más importante de Cataluña o con Podemos en decenas de Ayuntamientos y en navarra.