El secreto que avergüeza ahora a Carmena y a otras feministas radicales
La exalcaldesa de Madrid firmó un manifiesto sobre la Ley contra la Violencia de Género que tiene muy poco que ver con la postura actual del colectivo feminista acerca de la norma.
La Ley de Violencia de Género es intocable, o al menos eso es lo que manifiestan desde la izquierda y desde los colectivos feministas que salen a la calle para defender los derechos de las mujeres. Sin embargo, no siempre fue así.
Hubo un momento en el que hasta la mismísima Manuela Carmena consideraba que la norma simplificaba a las las mujeres como "víctimas" y a los hombres como "dominadores". Ni Ortega Smith y VOX llegaron tan lejos en unas afirmaciones contra esa ley.
Corría el año 2006, Zapatero estaba en el Gobierno y una de sus medidas estrella era la Ley contra la Violencia de Género. Además, se estaban tramitando o ya se habían aprobando otra serie de normas que estaban desarrollando "una excesiva tutela de las leyes sobre la vida de las mujeres, que puede redundar en una actitud proteccionista que nos vuelva a considerar incapaces de ejercer nuestra autonomía".
Ésta era la queja de un grupo de juristas y feministas, entre las que se encontraban Manuela Carmena o Uxue Barco, y que recogía un artículo publicado en El País , titulado Un feminismo que también existe, en el que se ponía en cuestión la Ley Contra la Violencia de Género o las modificaciones establecidas en cuanto a la custodia de los hijos tras el divorcio, ya que incluían opiniones "poco matizadas y excesivamente simplificadoras. Tienden a presentar a los hombres y a las mujeres como dos naturalezas blindadas y opuestas: las mujeres, víctimas, los hombres, dominadores".
Además, añadían que "la imagen de víctima nos hace un flaco favor a las mujeres: no considera nuestra capacidad para resistir, para hacernos un hueco, para dotarnos de poder y no ayuda a generar autoestima y empuje solidario. Lo mismo se puede decir de la visión simplificadora de los hombres: no existe, en nuestra opinión, una naturaleza masculina perversa o dominadora".
Críticas a la ley del divorcio
También mostraron sus recelos en cuanto a la ley de divorcio puesto que "partiendo de la mayor relación de las madres con los menores, parece aventurado afirmar que han de estar siempre mejor con la madre que con el padre. También nos parece abusivo atribuir a los hombres, con carácter general, intenciones espurias al solicitar la custodia y pensar que a las mujeres sólo las mueve el amor filial".
Así pues, concluyeron que no deseaban "un feminismo revanchista y vengativo, deseamos simplemente relaciones en igualdad, respetuosas, saludables, felices, en la medida en que ello sea posible, relaciones de calidad entre mujeres y hombres", algo que a su juicio no era la base de la Ley contra la Violencia de Género que en 2006 era muy mejorable y que ahora parece intocable.