El caso Carlota traspasa fronteras: "GH" y Mediaset en el punto de mira mundial

Al Grupo de Paolo Vasile se le complican cada vez más las cosas. El escándalo desatado a raíz de que vieran la luz unas imágenes de Carlota Prado en el confesionario de Gran Hermano visualizando una presunta agresión sexual sufrida no cesa. La noticia no solo ha sido recogida por diversos medios europeos, sino que también ha cruzado el charco.

El último en hacerse eco del caso Carlota ha sido The Independent. Concursante española de Gran Hermano, obligada a ver su “abuso sexual” en el confesionario, titula el periódico británico. Y es que después de que este asunto haya salpicado a Mediaset dos años después de que ocurrieran los hechos, cada vez son más los detalles que van viendo la luz.

Hace unos días era la BBC quien recogía en sus páginas el caso Carlota. El medio británico informó de que fuentes de Zeppelin, la productora del reality, admitieron a la BBC que "se produjeron errores" y que "a pesar de que había sospechas sobre el comportamiento de José María (el presunto agresor), también había dudas sobre qué estaba realmente ocurriendo ya que él y Carlota eran pareja dentro de la casa".

Asimismo, dichas fuentes explicaron al medio británico que después de varios minutos, le dijeron a José María que dejase de hacer lo que estaba haciendo. "El informe del equipo del turno de noche fue estudiado por los productores ejecutivos a la mañana siguiente, los cuales tomaron la decisión de expulsar a José María", añaden.

Sin embargo, son muchas las dudas que planean sobre los medios internacionales. "¿Por qué en una casa llena de cámaras y donde los concursantes están bajo vigilancia parece que nadie vio en ese momento que se estaba produciendo un abuso?" o "Si se dieron cuenta, ¿por qué nadie intervino?". Éstas son algunas de las preguntas que se hacen los diarios fuera del territorio nacional.

Además de la BBC y The Independent, medios estadounidenses, holandeses, belgas, portugueses e indios también han compartido con sus lectores el caso de Carlota Prado.