Antonio Burgos noquea a Sánchez e Iglesias con el grito que falta en el balcón
El periodista y escritor lanza una pregunta al aire en voz alta que abochorna a más de uno y que deja en evidencia tanto al PSOE como a Unidas Podemos en un momento determinante para todos.
Mucho se destacan en las redes y los medios los comportamientos insolidarios de los que o no se quedan en casa o no respetan las normas impuestas para frenar el coronavirus, sin embargo, este miércoles Antonio Burgos aprovecha su columna de ABC para destacar lo contrario: el comportamiento "ejemplar" de la gran mayoría de españoles.
En este sentido recuerda que cuando le dijeron que en la Lombardía habían decretado el confinamiento de los vecinos en sus casas, pensó: "Pues verás tú si aquí llegamos a eso. Para que la gente no salga, con lo callejeros que somos, que hacemos la vida en la calle, va a hacer falta que pongan un guardia civil en cada portal".
Sin embargo, ahora se congratula de que "no ha sido así, sino todo lo contrario. La gente te invita a no salir ni lo imprescindible. Hay una ola de espontánea solidaridad".
Se hace eco Burgos de los aplausos de las ocho de cada día en favor de la salud de todos, empezando por la de uno mismo: "El aplauso que cada tarde le da España al personal sanitario de los hospitales y a cuantos están en primera línea de fuego en esta batalla, cubriendo el frente de una guerra que nunca hubiéramos sospechado que íbamos a tener que librar. Y que ganaremos".
En un paso más interpreta los aplausos, personal sanitario aparte, como "una ovación del pueblo a sí mismo, a su propio comportamiento ejemplar".
Y muy crítico, aún va más lejos: "No es que no nos merezcamos este Gobierno, con su inmenso desacierto de promover irresponsablemente la manifestación del 8-M con el coronavirus encima. Es que hay veces en que el pueblo supera y desborda a sus dirigentes".
Intenta el también escritor no ponerse pedante "pensando que esta España es la del 2 de mayo, que hizo la Historia por su cuenta, como protagonista colectivo y autoridad de sí misma. Pero sí columbro, y no sabría cómo razonarlo, que en España se ha extendido un sentimiento de firmeza parecido, mutatis mutandis, a lo que fue en su momento el espíritu de Ermua".
Y para terminar lanza una pregunta al aire que deja un poco en evidencia a más de uno al alegrarse de por lo menos el Gobierno sea una coalición de la izquierda con la ultraizquierda: "¿Se imaginan que esta crisis nos hubiera cogido con un gobierno del PP, la que hubieran liado los que usted sabe? El grito que no se ha oído, ni se oirá, "¡Gobierno dimisión!", hubiera resonado por España entera".