La "terrorífica" historia de la famosa vecina de Valencia gracias a "Callejeros"
Hace más de una década, Isabel y Vicenta se hicieron conocidas a raíz de su conflicto vecinal que hacía que Isabel saliera de casa con una bolsa de basura en la cabeza.
Isabel, la vecina de Valencia
Isabel y Vicenta saltaron a la fama a ración de una emisión de Callejeros en 2007. Las vecinas de Valencia tenían 125 denuncias interpuestas entre ambas por gritos constantes, amenazas de muerte, así como lanzamiento de heces y orinas. Una década más tarde, la Justicia dio la razón a Isabel, quien se veía obligada a salir de su casa con chubasquero y una bolsa de plástico en la cabeza, y condenó a Vicenta a nueve meses de prisión y a pagar 10.000 a su vecina por acoso.
Un conflicto vecinal que si hizo viral y que a día de hoy todo el mundo sigue recordando. Es por ello que Jesús, el hijo mayor de Isabel, ha querido contar cómo él y su hermano vivieron su "terrorífica infancia" y se ha referido a su madre como "una heroína".
"Nunca he hablado de este tema supongo que por vergüenza o temor a lo que me pudieran decir o las burlas hacia mi familia", comienza diciendo el joven, quien asegura que es un tema "delicado" para él y que rememora una época "muy mala" de su vida. "Mi infancia estuvo condicionada desde muy pequeño por los sucesos que tanto se han dado a conocer en la televisión. Sin embargo, me dolió en el alma que se ridiculizara así a mi madre y se formara un circo. No se dio a entender el miedo que pasábamos cada día, en nuestra propia casa", explica.
El hijo de Isabel asegura que su vecina les hizo "la vida imposible" para que se fueran del piso y que les "atemorizaba cada día". No obstante, que querido recalcar que su madre luchaba a diario para mantenerle a él y a su hermano "a salvo".
"Sé que se ha hecho mucha burla con el tema de las bolsas de basura. A simple vista, puedo entender que pueda parecer divertido y que quede bien como disfraz. Pero imaginaos que a vuestra madre le tiran orines, lejía, productos químicos. Te puedes quedar ciego o tener problemas serios de visión. Mi madre tenía un miedo atroz, nunca lo mostraba", relata.
"Siempre recordaré hablar con mi madre mientras lloraba porque no podía más", cuenta. A pesar de que años después la Justicia les dio la razón, el joven lamenta que la gente no conoció lo que verdaderamente estaba ocurriendo. "Al final, la gente se queda con la parte graciosa de la historia (que al final es la que dieron los medios) y no se intenta ver más allá", concluye el hijo de Isabel.