La negra profecía de Reverte retumba en Zarzuela: Leonor no reinará nunca
El escritor cree que al reinado de Felipe VI, "el único dique que nos queda frente al disparate y al putiferio", no le seguirá el de su primogénita. ¿Hacia dónde camina España?
"Lo que tiene que ser". La frase de Doña Letizia en respuesta a una niña que le había preguntado a la Princesa Leonor qué quiere ser de mayor se ha convertido en la mejor declaración de intenciones de los Reyes sobre el futuro de la Monarquía.
Sin embargo, en tiempo de tribulaciones para la Corona por el último escándalo protagonizado por Juan Carlos I, el futuro de la heredera no está del todo claro para algunos. Y en ese algunos se incluye Arturo Pérez Reverte.
El laureado escritor tiene una premonición, y no precisamente buena para los Borbones. En su último artículo en XL Semanal pronostica: "Si he de ser sincero, dudo que la joven Leonor llegue a reinar algún día. Queda feo decirlo, pero es lo que pienso. Supongo que habré dejado de fumar para entonces, así que tampoco me afecta gran cosa. Pero el presente sí me afecta. Vivo en España y espero seguir haciéndolo unos años más; por eso necesito que éste sea un lugar habitable", señala.
Su columna es, en realidad, una oda a la figura de Felipe VI, al que define como "un hombre sereno y formado, irreprochable hasta hoy, mucho más Grecia que Borbón", "una buena persona y un sujeto honrado". Y continúa: "Ama a España y cree de verdad ser útil para preservarla en tiempos de tormenta. Hace lo que puede y lo que le dejan hacer. Y en mi opinión es el único dique que nos queda frente al disparate y al putiferio en que puede convertirse esto si nos descuidamos un poco más".
Pero también es un negro vaticinio sobre la Monarquía española y sobre quien ha de coger el testigo, la primogénita de Don Felipe. Y Pérez Reverte mira al tendido y, desanimado, no encuentra ese "arbitro supremo cuya serenidad y talante lo sitúen por encima de las luchas políticas", que es lo que tiene que ser un presidente de la república.
No lo ve el escritor ni en Pedro Sánchez, ni en Pablo Iglesias y su "república plurinacional de la señorita Pepis, ni tampoco en José María Aznar con su "ridícula y embustera arrogancia" y mucho menos en Felipe González, en Irene Montero o en Santiago Abascal.
Suspira Pérez Reverte pensando que al menos el presente está blindado con Felipe VI. El futuro es otra cosa.