Una famosa presentadora arruinada recibe una oferta de trabajo gracias a Cuatro
Los problemas económicos están afectando a muchos trabajadores y las ayudas por parte del Gobierno no solo están tardando ahora más en llegar, sino que en ocasiones no se producen.
Cuatro al día contó este martes con el testimonio de una famosa presentadora de televisión que está ahora arruinada, por lo que ha tenido que recurrir a "las colas del hambre" para poder comer. La que fuera una cara conocida de la pequeña pantalla no ha querido desvelar su identidad, aunque se sabe que tiene 55 años y que no recibe ningún tipo de prestación tras haber enviudado hace unos meses.
"No tengo trabajo y no recibo ningún tipo de prestación por parte del Estado", comenzó explicando. Y es que ni ella ni su marido llegaron a contribuir el mínimo exigido para poder percibir una pensión. Debido a la enfermedad de Parkinson que padecía su esposo desde hacía 14 años, gran cantidad del dinero del que disponían fue dedicado al tratamiento.
"Durante todos estos años que no hemos percibido nada, gracias al colchón económico que teníamos y a amigos generosos hemos podido vivir hasta este momento. Pero ahora eso se ha terminado. La enfermedad se ha llevado mucho de ese dinero por el tratamiento que conllevaba y operaciones que la seguridad social no cubría", comentó la presentadora.
Unas palabras tras las cuales no dudó en hacer una petición, aprovechando que estaba teniendo la oportunidad de ser entrevistada por Joaquín Prat. "Me gustaría, por favor, a ver si alguien pudiera y quisiera aprovecharme ya que me considero una persona culta, preparada, y a ver si alguien puede darme un trabajo", dijo, mostrándose muy optimista con que saldría de la situación que está atravesando.
Una petición que surtió efecto y que hizo que una persona llamara al programa interesada en ofrecerle un trabajo. "Estaba viendo el testimonio de esta mujer y me estaba revolviendo por dentro. Soy mujer, tengo hijos, soy empresaria, también lo paso mal en algunos momentos", comentó la persona al otro lado del teléfono, diciendo que ahora le tocaba a ella ayudar. Una oferta que agradeció enormemente la presentadora de televisión y que emocionó a los espectadores, quienes hicieron que el magacín obtuviera un buen 5,6% de cuota de pantalla y 598.000 seguidores.