La entrevista a Junqueras en TV3 reaviva la guerra por el control de la cadena
Vuelan cuchillos. Los de Puigdemont consideran que la televisión pública catalana está favoreciendo a Esquerra de cara a las elecciones catalanas y reivindican el mismo trato.
Junqueras durante la entrevista en TV3 desde la cárcel.
La más mínima chispa prende la mecha entre ERC y Junts per Catalunya, y esta vez ha sido una chispa grande.
La entrevista a Oriol Junqueras en TV3 desde la cárcel de Llenoders ha reabierto las hostilidades entre ambas facciones del independentismo por el control de los medios públicos.
Los de Carles Puigdemont se quejan de que, desde que Quim Torra fue inhabilitado y Pere Aragonès asumió sus funciones, la televisión pública catalana se ha puesto descaradamente al servicio de Esquerra. Entre otras cosas, reduciendo las colaboraciones de la defensora número uno de Puigdemont, Pilar Rahola.
La cuestión es que el líder de ERC inauguró oficialmente la precampaña catalana con una larga entrevista de casi una hora y la complicidad de la presentadora de Els Matins, Lídia Heredia. Que, llegado el momento de despedirse, le dijo: "Le esperamos en plató".
¿Está tomando abiertamente partido la cadena catalana, que tan pronto recauda diez millones de euros en una marató solidaria como horas después cede la pantalla a un político condenado por sedición y malversación?
Según JxCat, sí. Y recuerdan que recientemente ha entrado como tertuliano Sergi Sol, que trabajó para ERC hasta el verano, siendo la mano derecha de Junqueras.
Los de Puigdemont reclaman que TV3 les compense dispensando el mismo trato y los mismos minutos de pantalla para Puigdemont y su candidata, Laura Borràs.
En la entrevista, como ya contó ESdiario, Junqueras solemnizó la negativa de Esquerra a pactar con el PSC, pese al voto entusiasta y favorable de sus diputados a los Presupuestos de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. "Es imposible que nosotros pactemos con el PSOE en el Gobierno de Cataluña. Están satisfechos y contentos con las políticas represivas", señaló el líder de ERC. "Es absolutamente imposible", insistió.