HBO muestra un insólito suceso farmacéutico con “El Crimen del Siglo”
En tiempos de una situación especial referente a la salud mundial, HBO lleva a las pantallas un impresionante documental que relaciona a la industria farmacéutica y casos de corrupción y enriquecimiento a costa de la vida de muchas personas. Un …
En tiempos de una situación especial referente a la salud mundial, HBO lleva a las pantallas un impresionante documental que relaciona a la industria farmacéutica y casos de corrupción y enriquecimiento a costa de la vida de muchas personas. Un documental en definitiva fuerte, contundente y reflexivo.Alex Gibney es un director premiado que ha decidido llevar al aire un trabajo exhaustivo, crudo y altamente dramático, donde se muestra un mundo oculto para muchas personas, principalmente relacionado con la salud y las industrias de las farmacias.
El Crimen del Siglo se refiere a una situación ocurrida en los Estados Unidos de Norteamérica, donde la comercialización de productos como los opioides y la oxicodona fueron producidas en enormes cantidades y comercializadas de una manera alarmante. El director se refiere en términos directos a una responsabilidad de las autoridades del gobierno en complicidad con la industria de los medicamentos en aquella famosa y extraña premisa denominada ?La crisis de los opioides? y donde al parecer muchas personas fueron víctimas fatales de la situación.
Gibney ha demostrado en cada uno de sus trabajos documentales, que su búsqueda siempre es de forma incisiva y su idea es siempre llegar hasta los últimos detalles de los sucesos que denuncia. Sus enfoques van reflejados hacia los aspectos de doble sentido, como la hipocresía de muchas instituciones, así como señalamientos directos de los entes que muestra. En el caso de esta docuserie, el director va directo a señalar a empresas reconocidas a nivel mundial, así como médicos, políticos y personalidades del mundo económico como responsables directos de la situación relacionada con los opioides.El director muestra pruebas y acusaciones directas, documentos, entrevistas, testimonios de testigos, víctimas y hasta funcionarios del estado y de las industrias de la farmacia, que revelan que las acciones de estos entes no fueron las correctas. Todo con un único fin, enriquecimiento ilícito, corrupción y abuso de poder. Según el director a costa de las personas adictas al consumo de opioides legales.Según las investigaciones y estadísticas, en Estados Unidos al parecer la adicción hacia fármacos es un problema fuerte que tiene muchos años en la palestra pública y que cada día afecta a miles y miles de sus ciudadanos. Según los números, estas adicciones le han costado un billón de dólares al país y ha terminado con la vida de más de medio millón de personas, contando además a los que sufren deterioro físico o enfermedades degenerativas a causa de estos componentes químicos.
La denuncia que hace el director tiene que ver más con un método evidentemente manipulador y siniestro. Según Gibney, esta trama corrupta al principio se ideó para crear un número nutrido de adictos a los opioides, luego les limitaba el suministro para aumentar de precio, por lo que muchos pacientes buscaban alternativas como el fentanilo o la heroína. Según la investigación, esto se da entre un convenio para recetar sin necesidad un tipo de medicamento delicado, como los opioides, que se suministran a pacientes terminales, a jóvenes o adolescentes con problemas menores como dolor en rodillas o articulaciones. Según el documentalista, esto tenía un firme propósito, lograr cada día más adicciones.El documental está dividido en dos secciones. En la primera se muestra a las personas que crearon el plan para aumentar sus ingresos financieros por medio de sus industrias farmacéuticas, así como funcionarios que decidieron participar en el plan. En el segundo segmento salen los sistemas relacionados al gobierno relacionados al tema, los procedimientos comerciales del fentanilo, las relaciones gobierno-farmacia y sus ejecutores y las manipulaciones que tenía la industria farmacéutica para que los médicos recetaran solo sus productos.Pero el escándalo va mucho más lejos. El Crimen del siglo muestra material audiovisual y pruebas en documentos sobre visitas medidas, sobornos aceptados por legisladores y una indiferencia gubernamental sobre la situación que era al parecer más que evidente.Mucha expectativa se ha creado en torno a este material documental, principalmente en momentos donde la industria farmacéutica está en el tapete de la atención mundial y que seguramente podría servir como un material reflexivo sobre una situación que durante muchas décadas ha sido motivo de preocupación tanto de los gobiernos como de las personas y esto no es más que la salud y lo que tienen la autoridad para relacionarse con ella. HBO ya la tiene en su parrilla de programación.