Ayuso sentencia que Telemadrid no puede ser un "negocio de cuatro"

Isabel Díaz Ayuso no quiere que Telemadrid sea un "negocio de cuatro", por ello ha defendido su propuesta de modificación de la normativa del ente público que incluye la renovación de su cúpula directiva. "Un servicio público, sin público, es un negocio de cuatro", ha afirmado rotunda la presidenta madrileña en el Pleno de la Asamblea de Madrid.Además, ha añadido que su única intención es "asegurar su viabilidad", después de que la portavoz de Unidas Podemos, Carolina Alonso, recriminase al Ejecutivo regional que "habla de libertad, pero la primera ley que nos trae aquí es para tomar el control absoluto de Telemadrid. Ha venido aquí a ser la próxima presidenta del PP nacional y tomar el control de Telemadrid y poder contratar a tertulianos y productoras amigas y hacer de eso un chiringuito".

Sin embargo, Ayuso ha explicado que Telemadrid "cuesta lo mismo que dos Zendal y estoy obligada a asegurar su viabilidad", para después denunciar la mala gestión que ahora está llevando a cabo su director general, José Pablo López.

"Me ocupo de cumplir el contrato programa cuando la dirección de la cadena ni siquiera ha establecido un plazo para elaborarlo y si no llega a ser por el trabajo de mi gobierno los empleados se quedan sin cobrar las nóminas", ha indicado.

De hecho, ha añadido que "hemos adelantado 10 millones de euros en febrero y han pasado seis años desde la última ley y las normas se reforman en los parlamentos", recordando, además, que el Consejo de Administración actual "no representa la voluntad de los ciudadanos en las urnas".

Cese del director general, José Pablo López

La propuesta normativa impulsada por el PP incluye el nombramiento por cuatro años improrrogables del nuevo director general de la cadena, que será ratificado por la Asamblea por dos tercios en primera votación y mayoría absoluta en la segunda. Mientras que se habilita al nuevo, el Consejo de Gobierno nombrará a un administrador provisional.

De esta manera, José Pablo López, que lleva en el cargo desde 2017, sería cesado para cumplir con la norma. Además, hay que tener en cuenta que Telemadrid vive desde hace tiempo en una situación de interinidad, sin elecciones sindicales, con una audiencia modesta y dependiente casi en exclusiva del erario público por sus escasos ingresos comerciales a lo que hay que añadir las acusaciones de parcialidad hacia la oposición que ponen en solfa la "independencia" a la que apela su primer ejecutivo.