Arranca la revolución en Telemadrid que barrerá toda la Dirección anterior
Arranca la revolución en Telemadrid que barrerá toda la Dirección anterior
La revolución en Telemadrid ya ha comenzado. El Gobierno madrileño ya ha oficializado que el expresidente de RTVE José Antonio Sánchez será administrador provisional de Radio Televisión Madrid (RTVM), y con su llegada se avecinan nuevos cambios en el organigrama de la cadena.Tal y como ya adelantó ESdiario, Sánchez era uno de los nombres que sonaban con fuerza para suceder a José Pablo López al frente de la dirección del ente público y su nombramiento se ha producido solo días después de que se aprobase en la Asamblea de Madrid la reforma de la ley que regula el ente público presentada por el PP, gracias a la abstención de Vox y con el voto en contra de los partidos de izquierda (Más Madrid, PSOE y Unidas Podemos).
Dicha modificación establece el cambio de modelo de elección de su Dirección y permitía el relevo de la actual cúpula, de la que era director general, José Pablo López, desde 2017. Una norma muy similar a la impuesta por el Gobierno en RTVE o por la Generalitat en la Corporación de medios catalanes, pero desde los partidos de la izquierda, siempre en sintonía con la Dirección, ya se han posicionado en contra de la misma.Con la llegada de Sánchez se avecinan nuevos cambios en el organigrama de la cadena, ya que los máximos responsables de los servicios informativos, Jon Ariztimuño y Jaime Treceño, en sintonía plena con López, están en el punto de mira.
Más cambios en la cadena
Aunque aún no hay nada confirmado, según ha podido saber ESdiario, los cambios afectarán a muchas más áreas, incluidas la Dirección de Informativos e incluso la presentación de los emblemáticos Telenoticias, aunque se espera que sea el propio Sánchez el que termine de perfilar el equipo con el que pretende contar en esta nueva etapa. Sánchez fue ya director general de Telemadrid bajo los mandatos de los expresidentes Esperanza Aguirre e Ignacio González, durante los años 2011 y 2014 y fue el encargado de ejecutar el ERE que supuso la salida de más de 800 trabajadores."Es verdad que en el currículo de Sánchez está el ERE de Telemadrid", ha reconocido este miércoles Enrique Ossorio, el portavoz del Gobierno. "Afortunadamente se nos ha olvidado la situación de aquel 2012, que era terrible. Las políticas de Zapatero nos llevaron a un paro brutal, con la Comisión Europea a punto de intervenir España y el estado del bienestar al borde del colapso", ha explicado.Sin embargo, ha destacado que "la labor del administrador es de transitoriedad, hasta que se nombre a un director general con carácter definitivo. Estoy seguro de que en ese lapso de tiempo, su profesionalidad y experiencia acreditada pueden ser muy buenos para fomentar la neutralidad y la eficiencia".
Necesita el refrendo de la Asamblea
Su nombramiento tendrá que contar con el visto bueno de Vox porque debe ser ratificado en septiembre en el Pleno de la Asamblea, cuando se reanude el período ordinario de sesiones, tal y como establece la nueva normativa. Sin embargo, desde la oposición ya se ha emprendido la primera campaña contra el nuevo 'jefe' de Telemadrid. La portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en la Asamblea, Hana Jalloul, ha subrayado que la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, ha consumado el "asalto" a Telemadrid y ha criticado que la Comunidad busca así "limitar y controlar" la pluralidad en la corporación pública madrileña.La misma línea que han seguido el resto de partidos de la oposición y también sus sindicatos afines. "Si el objetivo era liquidad la independencia de Telemadrid, Ayuso ha encontrado a su verdugo perfecto", ha criticado Mónica García, portavoz de Más Madrid.Por su parte, Luis Lombardo, presidente del comité de empresa de la compañía., ha asegurado que "es el responsable de la etapa más negra de Telemadrid y Onda Madrid, ejecutor del mayor ERE de la Comunidad de Madrid e investigado por la gestión del ERE".
Sin embargo, con este nombramiento, Ayuso ha querido poner fin a la situación de interinidad en la que vivía sumida la cadena, sin elecciones sindicales, con una audiencia modesta y dependiente casi en exclusiva del erario público por sus escasos ingresos comerciales. Y entre acusaciones de parcialidad hacia la oposición que ponen en solfa la "independencia" a la que apelan los detractores del nuevo nombramiento.La presidenta aseguró en la Asamblea que su única intención es que Telemadrid no sea "negocio de cuatro", con la intención de "cumplir el contrato programa, cuando la dirección de la cadena ni siquiera ha establecido un plazo para elaborarlo y si no llega a ser por el trabajo de mi gobierno los empleados se quedan sin cobrar las nóminas", zanjó.