ESdiario

La telebasura sigue cebando a la audiencia

En una semana cargada de estrenos, el público se decanta por los realities frente a las series y los programas familiares.

"Secret Story"

Publicado por

Creado:

Actualizado:

¡Vaya semanita! Llevamos siete días de estrenos apabullantes. Los datos de audiencia, esos que durante tres años nos han tenido anestesiados, inmóviles, narcotizados por la rutina de la superioridad con la que Telecinco ha deambulado por la parrilla de programación, esos datos, me temo, andan absolutamente revolucionados.No sé si vivimos inmersos en un cambio de tendencias sobre el consumo televisivo provocado por el envejecimiento de programas que llevan más de una década en la parrilla o, simplemente, estamos ante una galerna que desencadenará una insólita respuesta que podría evitar la debacle. El caso es que, a mitad de mes, tras el empate técnico de agosto, Antena 3 le saca medio punto a Telecinco, su competencia más directa. Lo del adelanto del prime time ha sido lo más parecido a un bluf.Mientras que Antena 3 se ha asegurado el pre prime time con Pasapalabra, los Informativos y El hormiguero; Telecinco se aferra al éxito de su mañana, al tiempo que la tarde de ambas cadenas fluctúa por días en favor de una u otra, si algo queda claro es que la batalla decisiva se libra en el prime time, Y en esta ecuación, a veces, también tiene algo que decir La Uno. Visto lo visto, los realities y la telebasura siguen seduciendo a la audiencia. A las pruebas me remito.

Los estrenos en televisión

El pasado lunes TVE estrenó la sexta edición de MasterChef Celebrity con un casting que prometía desde del minuto uno. Entre una Verónica Forqué que levita sobre sus mundos de yupi, la rusticidad que precede a Carmina Barrios, el alma deslenguada y descreída de Victoria Abril, Terelu, su churro y su disfraz de cerdita, y la hiperactividad de Bustamante… El estreno de MasterChef arrasó. Estaba cantado. Con un 20,1 % de cuota de pantalla casi dobló a El pueblo, el estreno de Telecinco se tuvo que conformar con un 10,3% de share. ¿A quien se le ocurre gastar un torpedo como ese frente a un portaaviones como MasterChef?A la serie de los hermanos Caballero le auguro un traslado de urgencia. O no. La segunda temporada de El pueblo ya se estrenó en Amazon Prime, supongo que estará amortizada y los responsables de la cadena de la Margarita, dando la noche por perdida, han decidido no gastar munición. Estando los números como están, igual habría que ir sacando bombas más poderosas y no dar nada por perdido, más que nada porque a pesar del éxito de MasterChef, el día se lo llevó la cadena de San Sebastián de los Reyes gracias a su regularidad.

Así las cosas, nos plantamos en el martes, el día equis, el día de la revolución. El adelanto del prime time por parte de Telecinco no consiguió su objetivo. Pasapalabra siguió en la veintena (21,4%) al tiempo que el adelanto de Secret Story se tuvo que conformar con un 13,3% de cuota. Nada nuevo bajo el sol. Unos datos similares a los del Tomate y algo mejores que los conseguidos por mi adorado Christian Gálvez y su Alta Tensión. Ahora bien, la segunda parte de Secret Story en Cuatro le regaló un estupendo 15,4% a la cuenta de la cadena. De nuevo el podio del martes fue para Antena 3 con un 14,9%. Otra vez, los datos recompensaron la regularidad.En el ecuador de la semana laboral el estreno de La última tentación (16,3%) lideró la noche frente a Veo cómo cantas (14,9%). 1.866.000 de espectadores se sentaron al unísono para ver la casa de los cuernos bis. Todavía no entiendo el éxito de este programa y aun menos que sea líder en la franja de 13 a 19 años (que deberían estar durmiendo). La noche de los infieles y los astados logró que Telecinco se adjudicara el día con un 15,4%.

Paradójicamente, esa misma noche El objetivo de Ana Pastor regresaba a La Sexta con nuevo día de emisión, nuevos colaboradores, nuevas secciones y nuevo plató, sin embargo, firmó el peor arranque de su historia. En su undécima temporada el programa solo sedujo a 337.000 espectadores con los que cosechó un mísero 3,3% de cuota de pantalla. El asalto Ana Pastor y Risto Mejide se decantó por el publicista. Cuando vendes algo como nuevo y resulta que es más de lo mismo pasan estas cosas.Y así llegamos a la noche del jueves, la noche de la gala del detectivesco Secret Story vestido de Gran Hermano VIP. Lo siento, lo cierto es que eso de los secretos ha pasado a un plano secundario o terciario. El reality obtuvo un estupendo 18,2% mientras que Los hombres de Paco cayó a un 9,4%. La casa es un polvorín. Una traca de fuegos artificiales que como exploten todos a la vez van a terminar fatal. En una semana se ha liado tal marimorena que a nadie le importa de quién es qué secreto. Conscientes de que tienen que dar espectáculo andan peleados, entre sí. Frigenti y Porta se han aferrado al victimismo, que en este caso es más falso que un billete de seis euros. La parejita es tan manipuladora como el Yago de Shakespeare, ambos creen que el mundo les tiene manía y me dan que están encantados porque piensan que les va a venir genial para no salir por patas de la casa como Chimo Bayo. Entre lágrimas, confesiones insospechadas, gritos y broncas generalizadas ya se ha armado el taco. La audiencia parece asegurada. La victoria del jueves fue para la cadena de la ex margarita que se metió en el bolsillo a un 16,2% de la audiencia.Personalmente me quedo con el impagable debut de Esperanza Aguirre como tertuliana en Todo es mentira. "Estoy aquí porque Pedro Sánchez no hace más que mentir". Veremos a ver qué tardes nos depara este tándem. Cuento los días para verla en Bake off con Esty Quesada, alias Soy una pringada… O la bocazas.No me siento capaz de vaticinar qué pasará esta noche de viernes con el estreno de La voz en Antena 3 frente a Got talent en Telecinco y la vuelta de Equipo de investigación en La Sexta con un especial "que no le va a gustar nada a José Luis Moreno". Permaneceré atenta porque, como van las cosas, estamos a menos de 15 días de un supuesto punto de inflexión. La vida es una noria, unas veces vamos de subida y otras de bajada. Deberíamos subir siempre de la mano de la humildad y bajar aferrados a la fortaleza.

tracking